El Ayuntamiento de Alicante ha talado medio centenar de palmeras de la Explanada al considerar que presentaban riesgo de desplome. A ellas hay que sumar las que se han eliminado en otros espacios públicos del centro de la ciudad, como el paseo de Gadea, donde en la mañana de ayer se talaron varios ejemplares más. En total, en el centro se han cortado más de cincuenta desde junio hasta ahora. Desde Atención Urbana descartan que estén enfermas o infectadas por el picudo rojo y aseguran que las palmeras que se han talado presentaban, en mayor o menor medida, riesgo de caída por ser ejemplares muy viejos, de entre 60 ó 70 años.

El concejal del área, Andrés Llorens, confirma que en el conjunto de la ciudad se han talado, desde el inicio de año, en torno a ochenta. Algunas de ellas ya se han sustituido y otras, según afirma, se repondrán a lo largo del verano. Más de la mitad de ellas se han talado en la Explanada, sobre todo en el último mes, cuando se han cortado 44 de las 430 que había en el emblemático paseo.

Los comerciantes de la Explanada relatan que la tala de las palmeras se realiza por la madrugada. De ahí que haya pasado desapercibida para muchos. Otros han mostrado su sorpresa ante el volumen de talas. Basta, no obstante, con recorrer el paseo para ver como en cada uno de los extremos quedan decenas de tocones de los troncos talados o como hay alcorques vacíos. Desde Atención Urbana justifican que el trabajo se ha realizado de madrugada y en un espacio corto de tiempo, entre junio y julio «para evitar molestias y garantizar la seguridad».

A las 44 que se han talado en las últimas semanas se suman otras que, de forma puntual, se han ido talando a lo largo del año y que ya se han repuesto por otros ejemplares más jóvenes. Al respecto, desde Atención Urbana inciden en que disponen de un plan para replantar ejemplares nuevos en el hueco que han dejado los retirados. Llorens incide en que el picudo rojo no ha alcanzado a estas palmeras y que la tala se incluye dentro del protocolo para evitar riesgos en el arbolado. La medida, según incide, pretende evitar desplomes como el de hace unas semanas sobre un coche en Juan Bautista Lafora o el de hace unos meses en Gadea. Hace dos veranos fueron cinco los ejemplares que se vinieron abajo, dos de ellos en la Explanada. Los técnicos de Parques y Jardines aseguran que tienen un especial cuidado de las palmeras de este paseo y añaden que, por ser un sitio concurrido, hay que tener en cuenta que el peligro que puede conllevar la caída de una palmera es mayor.

Por el momento, aseguran que no hay previstas más talas en la Explanada, si bien los técnicos indican que se seguirán realizando inspecciones periódicas, al igual que en el resto de la ciudad, para detectar si algún ejemplar presenta riesgo. Indican que en la ciudad hay 15.000 palmeras y que es necesario ir renovándolas y que todos los años se talan decenas de palmeras para reponerlas por otras más jóvenes.

Aunque los técnicos descartan cualquier enfermedad y aseguran que las palmeras de la Explanada no están faltas de agua, algunos comerciantes cuestionan su estado y muestran su preocupación. «Algo le pasaba a las que han talado», afirma Ángel Martínez. Otro comerciante, Juan García, incide en que hay algunas palmeras que «tienen un verde apagado y palmas secas». En ello coincide Loli Altet, quien añade que «si ves las de Elche tienen un verde mucho más vivo».