Un millar de personas, según la Policía Local, recorrieron ayer las principales calles de la ciudad para reivindicar los derechos humanos del colectivo de Gays, Lesbianas, Transexuales y Bisexuales (LGTB) en el mundo. Batucadas, banderas arcoíris y pancartas acompañaron la manifestación, que comenzó a las 19.00 horas en la Rambla de Méndez Núñez y finalizó en el Parque de Canalejas con la lectura de un manifiesto a cargo del secretario general de Diversitat, Juan David Santiago.
Las familias diversas y los transexuales fueron los protagonistas de la jornada de ayer por ser, según afirma Santiago, «los colectivos más vulnerables».
El secretario de Diversitat, la asociación que organizó la marcha y las actividades que se celebraron con motivo de la IV Edición de Orgullo Alacant, denunció durante la lectura del manifiesto la «injusta situación» en la que se encuentra el colectivo LGTB en muchos lugares del mundo y les animó a «seguir avanzando» para conseguir «la libertad efectiva y la igualdad real» con independencia de la orientación sexual o identidad de género.
Además se dirigió a «los gobiernos valenciano, español y europeo» y a la ciudadanía, para exigirles la «implantación de una democracia real e inclusiva luchando contra todo tipo de discriminación de las personas LGTB» y les incitó a luchar por «una sociedad más libre, igualitaria, justa y solidaria».
Representantes políticos de PSPV-PSOE, IU, UPyD, Compromís, Podemos, del Ayuntamiento de Alicante y de grupos sociales, sindicatos y otras instituciones estuvieron presentes en la manifestación. Una marcha, en la que las pancartas reivindicativas dieron paso a las tradicionales carrozas que pusieron el punto lúdico y festivo al ambiente.
Los autobuses de la Línea 03 también colaboraron en la celebración del Orgullo llevando durante todo el día de ayer, banderas arcoíris, el símbolo del colectivo LBGT . Una acción que, según explicó Santiago, sirve como «instrumento para poder superar prejuicios y estereotipos absurdos».
El día del Orgullo conmemora lo sucesos que ocurrieron hace 45 años en StoneWall INN en Nueva York. Un bar en el que hubo una redada que provocó varios días de protestas espontáneas por el hostigamiento a los homosexuales.
