Casi unanimidad total en el discurso de los dirigentes políticos del Partido Popular y de los socialistas de la provincia y la Comunidad Valenciana a la hora de valorar la abdicación del Rey: elogio y agradecimiento al monarca y confianza en la estabilidad que aporte el Príncipe. Mientras, las fuerzas políticas de izquierdas como Esquerra Unida o Compromís, entre otras, aprovecharon la ocasión para reivindicar que la Monarquía deje paso a la República y la necesidad de realizar un referéndum para confirmar esa sensación.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, destacó que el Rey ha sido impulsor de la libertad, la paz y la democracia. Fabra. «Ha sido el primer español en defender nuestros intereses, dentro y fuera de nuestras fronteras, y un fuerte impulsor de la libertad, la paz y la democracia», dijo. A juicio del presidente, «afrontamos el futuro con tranquilidad porque somos conscientes de que el Príncipe de Asturias va a seguir el legado de nuestro monarca y que, dada su excelente formación, dirigirá la Jefatura de Estado con garantías».
El líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, guardó silencio y se remitió por su parte a las declaraciones del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien, en nombre de toda la organización, elogió al Rey y manifestó que el Príncipe es la «normalidad institucional». El portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, por contra, considera que la abdicación del Rey «abre una puerta para seguir avanzando hacia la democracia total y hacia una sociedad realmente moderna. Por eso, desde Compromís consideramos que ahora es el momento de hacer un referéndum». La formación ha presentado una iniciativa en el Congreso para que se vote la celebración de la consulta. En esa línea también se pronunció su portavoz en las Cortes Valencianas, Enric Morera, quien dijo que «es una oportunidad histórica para que los ciudadanos puedan participar democráticamente en la toma de decisiones y votar un nuevo modelo territorial del estado». La coordinadora de Esquerra Unida, Marga Sanz, significó que «es el momento de abrir un proceso constituyente para levantar una arquitectura profundamente democrática del estado, en la que la ciudadanía participe y pueda decidir en referéndum entre República o Monarquía», subrayó Sanz.
La presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, agradeció al Rey «todos sus años de servicios a España», porque «ha demostrado que ha sabido ser un Rey para todos los españoles». La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, destacó que el monarca «ha encarnado los valores de la democracia» y manifestó que ahora hay que «dar la bienvenida» a una nueva generación. La primera edil de Elche, Mercedes Alonso, calificó la figura del Rey Juan Carlos de «intachable» e «incuestionable» por su conducta «ejemplar». En cuanto al Príncipe, indicó que éste supone «renovación, juventud y puede atraer a otra gente que no se significaba tanto con la Monarquía». Para Alonso «esto es positivo para España» y recalcó que ahora «todos a una apoyando al nuevo Rey cuando tome posesión». La regidora de Valencia, Rita Barberá, manifestó que el «gran valor que vale la pena subrayar es la bondad de la Monarquía, su importancia» frente a «cualquier otra aventura que no permite la sucesión constitucional con la normalidad con la que debe ocurrir».
Eduardo Dolón, alcalde de Torrevieja, manifestó que es «una persona que ha dedicado toda su vida a España y que ha sido clave en la construcción de la democracia». El regidor agregó que el Rey es «nuestro mejor embajador. Le honra abdicar para dejar paso a su hijo, provocando de esta forma un cambio generacional, a una persona que encarna la estabilidad, madurez, preparación y una gran responsabilidad para ser el próximo Jefe de Estado». El alcalde de Benidorm, el socialista Agustín Navarro, calificó como «tremendamente positivo» el papel jugado por el Rey. «En momentos difíciles el Monarca supo estar a la altura de las circunstancias». Para Navarro, «el relevo hará que la estabilidad institucional en nuestro país esté más que garantizada». «Creo que hace falta que el Príncipe se haga cargo ya de la representación real e institucional», agregó.
El alcalde de Orihuela, Monserrate Guillén, (Los Verdes) destacó que «era una noticia que esperábamos dado su estado de salud» y señaló que le gustaría «que España fuera como todos los países que nos rodean, esa mayoría son republicanos y se decide cada tiempo lo que se tiene que hacer». Desde Elda, la alcaldesa, Adela Pedrosa, (PP) quiso agradecer al Rey «su trabajo durante este tiempo en el que ha sido el mayor garante de la estabilidad y la unidad», para manifestar a renglón seguido «mi confianza y seguridad en el buen hacer de Don Felipe».
El alcalde socialista de Alcoy, Antonio Francés, manifestó que «el Rey ha realizado una gran contribución a la consolidación de la democracia, aunque es cierto que la institución monárquica había entrado en un estado de descrédito y tocaba tomar decisiones. En este sentido, pienso que la abdicación es la correcta». Francés se define a título personal como «no monárquico» pero considera que el príncipe Felipe «está preparado y cualificado, y puede desempeñar un buen papel como rey».
Javier Esquembre, alcalde de Villena, (Los Verdes de Europa) expresó que «la abdicación debe ser el primer paso para la proclamación de la República» porque se trata de «un modelo más justo, ético y donde ser Jefe de Estado no viene condicionado por el nacimiento, sino por la elección ciudadana». La alcaldesa de Novelda, Milagrosa Martínez, trasladó su «agradecimiento al Rey por su trabajo hacia nuestro país», mientras que su homóloga en Dénia, Ana Kringe, significó que «la labor ejercida por Juan Carlos I ha cimentado el mayor periodo democrático de prosperidad, estabilidad y progreso de España. Por ello, sólo puedo expresar mi gratitud ante su figura y mi respeto ante su decisión de abdicar en el Príncipe Felipe, quien a buen seguro continuará siendo garante de la estabilidad institucional para seguir avanzando en la convivencia, libertad, respeto a la Constitución y fortaleza de nuestro sistema democrático».
El alcalde de Crevillent, César Augusto Asencio, valoró que «por edad y salud es bueno que haya una ordenación en el proceso de sucesión que garantice la continuidad de la corona». El primer edil aseguró que «es bueno que el Rey lo haya hecho en plenas facultades ya que es un momento adecuado». El alcalde de Petrer, Pascual Díaz, señaló que «es un día histórico y sólo puedo tener palabras de agradecimiento para Juan Carlos I. Él ha sido nuestro mejor embajador en el mundo. Ha hecho de España un país lleno de libertades y con una democracia fuerte. Un país próspero y cada vez mejor».
El alcalde de Aspe, Antonio Puerto, de Izquierda Unida, abogó por iniciar ya un referéndum en España. «Es el momento de una consulta a la ciudadanía para ver qué modelo de estado queremos». El primer edil aseguró que el Rey «es una figura obsoleta en los momentos en los que nos encontramos. Estamos obsoletos con un sistema monárquico cuando Europa está enfocada a otra cosa». Desde Castalla, su primer edil, Juan Antonio Candela, indicó que «ha sido una sorpresa muy inesperada, que se ha acogido con tranquilidad. Forma parte de la transición hereditaria, por edad o por las circunstancias de salud. Pienso que ha hecho una gran labor y le deseo lo mejor, así como todos los aciertos para su hijo en este nuevo reinado». Rafael Climent, alcalde de Muro por Compromís, manifestó que «en el siglo XXI hace falta un estado más moderno y creo que el Rey y la Monarquía no dan ese perfil. Por ello, creo que toca dar las gracias por los servicios prestados y si queremos un estado más moderno, deberíamos cambiar la Constitución para que cualquier ciudadano pueda presentarse y ser cabeza del Estado».
