El gran poder de atracción que tiene la Costa Blanca para el turismo extranjero ha hecho posible que la compañía aérea líder de bajo coste en el centro de Europa, Wizz Air, considerada la «Ryanair del Este», haya incluido por primera vez al aeropuerto de Alicante y Elche en su programación de vuelos para esta temporada alta y, en principio, desde junio conectará la provincia con enlaces directos a Hungría y Rumanía, en concreto con dos vuelos semanales a Bucarest y uno a Budapest.
Wizz Air acaba de celebrar su décimo aniversario desde que iniciara su vuelos desde Katowice (en el suroeste de Polonia) con Londres-Luton en mayo de 2004. Wizz Air se creó con la intención y la ambición de hacer más asequible los vuelos a los ciudadanos de la Unión Europea. A finales de 2013, la aerolínea había transportado a un total de 69 millones de pasajeros. En la actualidad, cuenta con una red de más de 300 rutas y 96 destinos en 35 países. La previsión es que este año transporte a 13,9 millones de pasajeros.
Wizz Air es la mayor aerolínea de bajo coste en Europa Central y Oriental y opera con una flota de 50 aviones Airbus A320 desde 16 bases a más de 300 rutas, conectando 96 destinos en 35 países. La compañía opera en España desde Madrid, Barcelona, Girona, Zaragoza, Málaga, Alicante, Valencia y Palma de Mallorca a distintas ciudades de Hungría, Bulgaria, Rumania, Polonia, Ucrania, República Checa y Lituania, y es una de las compañías que ha mostrado interés por mover pasajeros en el aeropuerto de Castellón. Cuenta con una plantilla de 1.700 trabajadores y en 2013 transportó a 13,5 millones de pasajeros.
La terminal provincial es la segunda turística de España que mejor se comportó, por otro lado, el pasado invierno al mover un total de 900.000 pasajeros en compañías de bajo coste, un 12% más que en 2013, lo que la convirtió en la segunda de España tras la de Málaga en el mercado aéreo «low cost» después de Barajas, El Prat y Málaga, y todo pese a que el aeródromo provincial es uno de los peores comunicados con su entorno del Mediterráneo.
La falta de unos buenos accesos con el resto de los municipios de la Costa Blanca podría acabar, por lo tanto, lastrando la recuperación de la ocupación de los hoteles y, en concreto, de la ciudad de Alicante, donde los turistas extranjeros son los que sostienen la ocupación. La buena programación del aeropuerto de Alicante-Elche posibilita conexiones directas en poco más de dos horas con ciudades del resto de Europa, algo que ha sido clave, por ejemplo, para la recuperación sostenida de los hoteles de la ciudad de Alicante, los más beneficiados por el incremento de las conexiones aéreas con ciudades donde no existen los tour operadores convencionales. Cristina Rodes, presidenta de la Asociación Provincial de Hoteles, tiene claro que «el aeropuerto ha sido clave para Alicante en lo que va de año por facilitar la llegada de turistas, sobre todo escandinavos».
La apertura de las rutas a Bucarest y Budapest en junio coincide también con el regreso de la española Air Europa al corredor con Madrid con vuelos baratos.
