El accidente del domingo que provocó más de una veintena de heridos, la mayoría niños, al salir volando cinco castillos hinchables ha puesto de relieve las lagunas en el protocolo del Ayuntamiento de Alicante para la autorización de estos eventos. Un procedimiento que el equipo de gobierno local prevé revisar a la luz de lo que determine la investigación abierta por la Policía Nacional. Entre otras cuestiones, se baraja regular la realización de una inspección técnica «in situ» de los hinchables una vez instalados, como se hace cuando se trata de atracciones de feria, y que en este caso no se llevó a cabo, como confirmaron fuentes municipales.

De hecho, ni desde el área de Fiestas ni desde la de Seguridad, que ayer se lanzaban la pelota sobre las responsabilidades en torno al evento, pudieron confirmar que los técnicos municipales revisaran las instalaciones hinchables una vez instaladas. Será la investigación abierta por la Policía Nacional la que aclare si los castillos estaban anclados como sostiene la empresa y si los anclajes eran los adecuados.

Desde el área de Fiestas, dirigida por el alcalde en funciones Andrés Llorens, inciden en que la autorización a la hoguera de La Cerámica para la instalación de ocho hinchables -finalmente fueron cinco los que se instalaron- se dio después de que se presentara toda la documentación referente a las revisiones de los castillos y al seguro de responsabilidad civil de la empresa y tras pedir informes a las áreas municipales de Ocupación de la Vía Pública, Mercados, Seguridad, Tráfico y Transportes. Entre ellos, destaca el informe de los Bomberos que, pese a no ver necesaria su presencia en el evento, sí consideraron en su escrito que antes de que los hinchables comenzaran a funcionar deberían aportarse «certificados técnicos específicos» sobre cuestiones como su «montaje» y «estabilidad».

A la luz de lo sucedido, tanto Llorens como el concejal de Seguridad, Juan Seva, coincidieron en que habrá que revisar los protocolos, tal y como han reclamado los grupos de la oposición del PSOE y EU para exigir mayores garantías de seguridad. «No hacer una revisión "in situ" es un error gravísimo», consideró el socialista Alejandro Parodi, mientras desde EU, Miguel Ángel Pavón, incidió en que «algo no está funcionando bien y debe corregirse». Por su parte, el edil del PP Juan Seva admitió que «habrá que esperar a la investigación policial, para determinar si es necesario reforzar o modificar» las exigencias en materia de seguridad para este tipo de eventos y Llorens coincidió en que «habrá que revisarlo».

Dos de los padres han presentado ya denuncia en la Comisaría de la Policía Nacional, que el día del accidente identificó a 27 víctimas, de las cuales 13 fueron trasladadas al hospital y dadas de alta posteriormente. Uno de los informes municipales previos a la autorización, el de Ocupación de la Vía Pública, recoge que «los autorizados serán los responsables de los daños que con motivo de la actividad se pudieran ocasionar a personas o cosas». Por su parte, el presidente de la hoguera La Ceràmica, Juan de Dios Bermúdez, declaró ayer que los hinchables contaban con el permiso del Ayuntamiento, que les pidió varias certificaciones y seguros, entre ellos los de responsabilidad civil tanto de las atracciones como de la empresa que los instaló.

Medidas de seguridad

La hoguera La Ceràmica, responsable del evento, insiste en que se cumplieron todas las medidas de seguridad que obligan a los organizadores de un evento a contar con ambulancia, Samu y Protección Civil.