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Música para la esperanza

«Casa Veritas» es el único centro que existe en la Comunidad Valenciana para tratar a los enfermos de sida

Música para la esperanza juan carlos valdivia

Bajo el intrigante lema de «Veritas», nombre propio de la diosa de la verdad, el miércoles se celebró en el ADDA un concierto a beneficio de Cáritas para apoyar uno de sus proyectos más sensibles, la atención a los enfermos de sida en situación de necesidad extrema, «Casa Veritas». Distintas asociaciones y personas anónimas se mezclaron con estos enfermos para apoyar un concierto en el que el grupo lírico Oper@mus deleitaron a los asistentes con obras de música sacra y piezas operísticas. Sin duda, un extraño cartel para algunos de estos enfermos, que acudieron voluntariamente para estrenarse en esto de disfrutar del «bel canto», y que se ajustó al objetivo de acercar, y a la vez, romper con la visión elitista que se tiene de la ópera en nuestro país.

Puede sonar desconocido, pero «Casa Veritas» es el único centro que existe en toda la Comunidad Valenciana para tratar a estos enfermos que, sin entorno familiar ni medios para reintegrarse, quieren esquivar la alta tasa de mortalidad de esta enfermedad. En algunos casos, lo consiguen; en otros, escapan y la mayoría permanece de por vida en esa lucha.

Siempre es difícil competir con una tarde Champion, pero los integrantes de Oper@mus -los tenores Eliseo Fabra y Jose Manuel Mas; el barítono Boris Godin; la soprano Natalia Karklelyte, y el pianista Shlomo Rodríguez, junto a la presentadora Arancha Alfaro-, desbordaron ilusión y cariño. Fue un acierto la celebración de esta velada para apoyar a los 14 residentes de «Casa Veritas» que en breve se trasladará a otro inmueble que necesita mobiliario, por lo que cualquier ayuda a este proyecto estrella de Cáritas que, según Jaime Pérez, es el que más lo necesita, será bienvenida.

Un concierto desde el corazón en apoyo a una pequeña, pero gran causa, que reunió en el Adda al delegado episcopal de Cáritas Diocesana, José Conejero; a su director, Jaime Pérez, y muchos sacerdotes y voluntarios como Rosa Prieto, directora de «Casa Veritas», Emilio Guerra, Cecilia Alegre, y el apoyo institucional de la consellería de Asuntos Sociales con Álvaro Prieto, y del Ayuntamiento con la presencia de Antonio Ardid, Carlos Castillo y Luis Barcala; y también de asociaciones como Nuevo Futuro o Dasyc, Rosa Vegara y Alba Pérez-Adsuar, o rotarios como Bruno Fernández.

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