Mañana se presentan en Nueva York, ante la Organización de Naciones Unidas y expertos técnicos mundiales, los módulos habitables diseñados por la empresa alicantina Urbana de Exteriores con la colaboración de la Universidad de Alicante y el Instituto Tecnológico del Plástico de Valencia. «Las condiciones de vida, a menudo infrahumanas, en las que se encontraban las víctimas del terremoto de Lorca, ubicadas en improvisados campamentos de refugiados», como relata la arquitecta Nathalie Gidrón, de Barbarela Studio, les llevó a crear estos módulos «ligeros, de fácil y rápido montaje, con gran diferencia térmica entre su interior y exterior, y de tejido transpirable e impermeable».
Son características que permiten mejorar «la calidad de vida de las personas en situaciones de emergencia» y suma el hecho de «estar elevado sobre el terreno para rellenarse con materiales del lugar, lo que aporta resistencia y gran protección ante impactos».
El contacto de primera mano, en Lorca, con las agencias especializadas de la ONU, «nos hizo ver que no se trataba de una necesidad aislada, sino que lamentablemente se vive día a día en muchas partes del mundo», explican desde la empresa.
