Fomento tiene previsto invertir 1.005 millones de euros este año en el Corredor Mediterráneo, 216 de ellos en la Alta Velocidad en el eje Tarragona-Valencia-Alicante - Murcia. Así lo indicó ayer el secretario general de Infraestructuras del ministerio, Manuel Niño González, quien participó en unas jornadas sobre la influencia del Corredor Mediterráneo en la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia que tuvo lugar en el Puerto de Alicante.
La jornada, en la que estuvieron presentes políticos, empresarios y entidades públicas y privadas, contó con la asistencia de los presidentes de la Comunidad Valenciana, Alberto Fabra, y de la de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, quienes subrayaron su compromiso en el impulso del Corredor Mediterráneo y reiteraron su confianza en que el ministerio respete los plazos previstos y la infraestructura llegue a Alicante y Murcia en 2016. En este sentido, Alberto Fabra resaltó que «logramos priorizar este corredor frente a otros» y que la UE lo asumiera como algo fundamental para todos los europeos. «El ministerio tenía pocos recursos, pero el eje se desbloqueó y se logró que se materializara un proyecto de 50.000 millones de euros», indicó, para añadir que ahora hay que priorizar las conexiones con los aeropuertos y las zonas logísticas, al tiempo que instó a los empresarios a aprovechar la oportunidad que abrirá el Corredor Mediterráneo.
La consellera de Infraestructuras, Isabel Bonig , resaltó en su intervención la importancia del cada vez más importante mercado asiático y el papel del Corredor Mediterráneo para aprovecharlo. «Se abren nuevas relaciones comerciales a través del Índico-Canal de Suez y Mediterráneo que se convierte en la estación de salida y entrada natual de mercancías al norte y centro de Europa», dijo, para añadir que «por primera vez en la historia, la fachada mediterránea tiene la capacidad de convertirse en el canal de entrada de mercancías del sur de Europa».
Bonig afirmó que dos años después de presentarse el proyecto, «el Corredor Mediterráneo ya es una realidad», con el inicio de las obras en Cataluña y el tramo Moncófar Castellón, al tiempo que indicó que «se trata de un proyecto de Estado en el que hay cuatro comunidades autónomas implicadas, pero que también es vital para Europa». Bonig también insistió en el papel que ha de jugar el sector privado «que debe implicarse en la gestión».
En la jornada de ayer se celebraron dos mesas redondas sobre la influencia del Corredor Mediterráneo en las provincias de Alicante y Murcia y sobre el frente mediterráneo como puerta de entrada de mercancías del sur de Europa. En las mismas intervinieron empresarios y representantes políticos de Alicante y Murcia.
Los empresarios destacaron la importancia de seguir trabajando para garantizar las infraestructuras necesarias que completen el proyecto. En este sentido, el presidente de la Cámara de Comercio, José Enrique Garrigós, manifestó que «la conexión con nuestro puerto, los polos logísticos en varias comarcas de la provincia y la conexión aeroportuaria son temas que aún no han encontrado solución técnica, ni presupuestaria», por lo que auguró que «nuestra lucha por el Corredor Mediterráneo no ha hecho más que comenzar». El presidente del Puerto de Cartagena, Adrián Ángel Viudes, por su parte, abogó por «una buena conexión en ferrocarril para mercancías con Madrid» y por una mejora y ampliación de los puertos mientras que el presidente del Puerto de Alicante, José Joaquín Ripoll, afirmó que «el Puerto de Alicante aún puede crecer sin grandes inversiones».
