Las Unidades de Emergencia Social de Cruz Roja (UES) de la provincia de Alicante duplicaron el número de personas atendidas viviendo en la calle a lo largo de 2013. El año pasado se ofreció servicio a 1.382 personas, cuando durante todo 2012 se atendió a 542. Los datos reflejan, además, que aunque la gran mayoría de las personas sin casa son hombres, "se está constatando un aumento de mujeres".

En las UES participan 174 voluntarios de toda la provincia como trabajadores sociales y asistentes sanitarios que cuentan con "el respaldo de los técnicos de Cruz Roja. Las unidades se financian con fondos "procedentes de la recaudación del 0,7 por ciento del IRPF destinada a otros fines de interés social" y en el caso de la ciudad de Alicante, recorren "las calles de la comarca del Alacantí, en estrecha coordinación con los ayuntamientos de cada localidad".

Natalia Araujo, técnico provincial del proyecto, ha explicado en un comunicado que "la implicación del voluntariado de la provincia está resultando muy alta, creciendo año tras año. Muchas personas se preocupan de los demás, e intentan aportar su granito de arena para mejorar la calidad de vida de las personas sin hogar, aportando unas horas de su tiempo para poder acercarse a quien más lo necesita".

Según la ONG, la clave para que el servicio tenga éxito es garantizar una respuesta rápida "frente a situaciones de emergencia social" y como puente entre "la calle y la red de atención", ha apunta Fernando Cuevas, responsable de Programas contra la Pobreza y Exclusión Social de Cruz Roja.

COMIDA Y ABRIGO

Para ello, las pautas que siguen los profesionales de las UES es "café, comida, abrigo, materiales de aseo e higiene, atención sanitaria y escucha, mucha escucha". "Hace tiempo que hemos constatado un aumento de la exclusión residencial entre las personas que atiende Cruz Roja, tres veces superior al que sufre la población general, y las UES son una parte de nuestra respuesta a este fenómeno", ha resaltado Cuevas.

El trabajo de Cruz Roja con estas personas en situación de extrema vulnerabilidad "va mucho más allá de medidas asistenciales", y se actúa como puente hacia otros recursos destinados "a la inclusión social y a través del trabajo en red" y a "alianzas con distintas organizaciones de la sociedad civil, como la Red Europea de Lucha contra la Pobreza (EAPN)".

Este tipo de intervenciones son algunas de las medidas que Cruz Roja está reforzando a través del "llamamiento de ayuda" lanzado en 2012 para incrementar la asistencia a personas en situación de extrema vulnerabilidad.