­El éxito que ha tenido la apertura de la línea de alta velocidad entre Alicante y Madrid, corredor que en sus seis primeros meses de vida ya ha superado el millón de pasajeros, ha provocado que el AVE haya acabado, prácticamente, con el enlace aéreo que une el aeropuerto provincial y Barajas, que se ha quedado con un servicio testimonial de sólo tres vuelos diarios (dos los sábados), cubierto por Iberia Express, la única compañía que trabaja este mercado. Las salidas, además, no son nada competitivas -9.30 y 13.45 horas- y la llegada desde Madrid a media tarde. Además, los precios siguen siendo prohibitivos y tampoco se prima la compra anticipada. Mientras, el AVE, que tiene un nivel de ocupación media del 80% y dobla sus composiciones los fines de semana, ofrece tarifas competitivas con el autobús (la empresa Alsa ha presentado propuesta para gestionar la línea cuando esta se externalice) y el coche, al margen de se puede viajar entre Madrid y Alicante en 2 horas y 20 minutos en el trayecto más rápido, que sólo tiene una parada en Albacete.

Tiempo de viaje que mejorará sustancialmente cuando los técnicos finalicen las pruebas del nuevo sistema de seguridad en el tramo Alicante-Albacete, y se puedan alcanzar los 300 km/hora, por lo que el tiempo de viaje más competitivo a Madrid será de dos horas y cinco minutos. De momento, sin embargo, habrá que esperar, porque el Ministerio de Fomento ha prolongado las pruebas técnicas para testar los sistemas de comunicación y seguridad del tramo Alicante-Albacete. Retraso que no obedece a ningún problema técnico y guarda relación directa con el endurecimiento de los protocolos de seguridad en todas las líneas de alta velocidad en España, desde el accidente del Alvia en la curva de Angois (Santiago de Compostela), cuando el descarrilamiento del tren al tomar una curva muy cerrada a más velocidad de la permitida acabó el tragedia con 79 muertos y más de cien heridos.

Siete meses después y con el AVE Alicante-Madrid creciendo en pasajeros más que ningún otro en España, los técnicos no quieren dejar cabos sueltos y la reducción del viaje más corto a las 2 horas y 5 minutos (trayecto más rápido sin la parada de Villena o, incluso, de punta a punta sin detenerse en Albacete) deberá todavía esperar a que se realicen todas las pruebas que consideren los técnicos que, al final del acabo, son los que firman los documentos que salen a la luz tras una desgracia, según admiten en el Ministerio. Lo cierto es que la polémica inicial por la velocidad se ha apagado y el índice de satisfacción del AVE es muy alto, como lo demuestran los más de un millón de pasajeros que han viajado entre Madrid y Alicante desde el 18 junio de 2013.

Iberia operó hasta el otoño de 2012 doce vuelos diarios entre Alicante y Madrid (seis en cada sentido). Además, La quiebra de Spanair y la retirada de la aerolínea irlandesa de la ruta con Madrid, ya habían provocado que el enlace se quedara entre 2009 y 2012 sin la mitad de los vuelos en una conexión que hasta 2011 llegó a contar con 27 vuelos al día en ambos sentidos. Ahora, el corredor aéreo con Madrid es testimonial. Los ajustes de Iberia afectan también a las cuentas de los hoteles de su entorno y Alicante. El Altet perdió en 2013 el avión de Iberia que «dormía» por las noches, lo que dejó vacías varias habitaciones ocupadas por las tripulaciones. Recordar, en este sentido, que la progresiva retirada de Iberia y el hecho de que sus tripulaciones no durmieran, por tanto, en Alicante fue una de las causas esgrimidas por la exdirección del extinto Sidi San Juan para explicar las pérdidas en la temporada baja.

Pese a que los recortes se produjeron en noviembre de 2012, siete meses antes de la llegada del AVE, en Alicante se interpretó que la compañía aérea había amortizado ya la llegada y de ahí la supresión. Hubo protestas de los usuarios y la aerolínea recuperaba en la primavera de 2013 la conexión nocturna con Madrid con un vuelo de Air Nostrum, enlace eliminado posteriormente. Los enlaces aéreos directos con Madrid son ya de los pocos nacionales que quedan en una terminal que ha ido perdiendo poco sus vuelos regulares nacionales. Atrás quedaron, por ejemplo, los tiempos en que desde Alicante se podía volar en enlace directo a Sevilla, Zaragoza, Málaga, Vigo, Santander o Asturias.

Castedo afirma que reducir el tiempo de viaje interesa a todos

La alcaldesa, Sonia Castedo, dijo ayer que no sólamente interesa a la ciudad de Alicante que el AVE con Madrid alcance los 300 kilómetros por hora para que el tiempo de viaje se se acorte sino tanto al Ministerio de Fomento como a Adif, puesto que esta línea «se está convirtiendo en la más rentable a nivel nacional porque hemos duplicado el número de pasajeros», apuntó Castedo. «Lo que se dijo, en principio, fue que entre diciembre de 2013 y enero de 2014 se trabajaría para reducir el tiempo medio de viaje, que ahora mismo está en las dos horas y veinte minutos, para intentar dejarlo en las dos horas y cinco minutos. Evidentemente, cuantas más mejoras tenga la línea del AVE, más mejoras habrá por parte de Fomento, más beneficio para Adif, y más beneficio para Alicante y para el resto de ciudades» que tienen parada, dijo, «en esta línea de alta velocidad».

Por otro lado, Adif ha prolongado hasta el otoño la conclusión de los trabajos para incorporar los trenes de cercanías Alicante-Elche-Murcia y Alicante-San Vicente por el túnel del AVE en la entrada a Alicante. Un retraso que tendrá repercusión negativa directa en la situación de los vecinos de los barrios unidos por el paso a nivel de Ausó y Monzó, cuya clausura en 2010, cuando se iniciaron las obras para la entrada del AVE, partió la ciudad en dos. Algo que no se solucionará, en principio, hasta el primer semestre de 2015. De hecho, por las vías en superficie siguen pasando también muchos AVE que realizan maniobras.