Un gran zona verde de 160.000 m2 que incluirá el parque central; entre 1.700 y 1.800 viviendas -de las cuales un 30% serán VPO-, con alturas de entre 8 y 17 plantas; y una gran torre de 20 pisos a levantar en la plaza del Estrella, que se pretende sea un nuevo icono arquitectónico de la ciudad mirando hacia el edificio del Tryp Gran Sol. Inmueble que puede acoger un hotel como epicentro de la infraestructura terciaria que potencie el entorno de la estación del AVE. Estas son las principales actuaciones que han diseñado los técnicos de la sociedad Avant para aprovechar los terrenos (468.000 m2) que quedarán libres tras el soterramiento de las vías de los trenes de cercanías en su acceso a Alicante, el próximo otoño.

El director general de Avant, Javier Martínez Barco, y la coordinadora del equipo redactor, Esmeralda Martínez, presentaron ayer el documento final del plan especial del sector que desde el pasado 2 de enero está ya en poder de la concejala de Urbanismo, Marta García Romeu, que debe ser la que mueva ahora ficha para proceder a las modificaciones y sacarlo a exposición pública, antes de remitirlo a la Conselleria de Infraestructuras para su visto bueno definitivo. El plan urbanizador tiene un coste aproximado de 40 millones de euros y un plazo de ejecución, en fases, que se prolongará, según apuntó ayer Martínez Barco, unos diez o doce años. De momento, si todo se desarrolla con normalidad, y hay presupuesto, los técnicos calculan que las primeras reparcelaciones podrían comenzar en dos años y medio. Desaparece el Puente Rojo y el aparcamiento público de la estación-término de Alicante.

El proyecto para urbanizar los terrenos liberados de las vías del tren se desarrollará sobre una superficie total de 468.000 metros cuadrados, de los que 220.000 serán de techo residencial (24.000 m2) para la viviendas; 160.000 m2 para zonas verdes y 68.000 m2 para la estación intermodal. Dotación, ésta última, que nadie sabe cuando se podrá realizar, ya que depende de los fondos del Ministerio de Fomento. En este sentido, el pleno del Ayuntamiento de Alicante aprobaba ayer, a propuesta de UPyD, la convocatoria de un concurso de ideas para decidir la intermodalidad. La Plataforma Renfe fue un poco más allá y exigió que haya un pronunciamiento general del pleno para exigir la dotación al Gobierno.

Mancha verde

En cuanto al documento preparado por la sociedad Avant, la ordenación propuesta modifica la forma y superficies destinadas a zonas verdes, aumentando el parque en 8.000 m2, lo que supone un 5% del total. Ocupará la parcela que va del actual paso a nivel de Ausó y Monzó a la Vía Parque. A ambos lados habrá zonas dotacionales comerciales y viviendas. La gran entrada se ubicará en el Pau 1, pero al mismo se podrá acceder por cualquier lugar, según apuntó ayer Esmeralda Martínez, cuyo equipo ha fijado la zona escolar junto al Pau 1, en la Gran Vía.

Inicialmente, el parque se estrechaba de manera muy significativa frente al barrio de Princesa Mercedes. La nueva versión elimina los edificios en ese sector, redistribuyendo la edificabilidad entre el resto de los barrios. De esta forma, el parque ganará en anchura. Los técnicos han previsto edificios singulares en todo el ámbito y, además de la torre de la plaza de la Estrella, en la confluencia de las avenidas de Salamanca y Aguilera, habrá otros inmuebles en el entorno de la Gran Vía, donde se proponen dos edificios de unas 17 plantas.

No se prevén viviendas en el borde urbano de los barrios de La Florida y Ciudad de Asís, los más deficitarios en materia dotacional, con el objetivo de facilitar el acceso a los espacios libres vinculados al parque urbano. El 30% de los pisos se destinará a VPO, bien en régimen de venta o de alquiler.

Por su parte, los vecinos, representados por José María Hernández, presidente de La Florida y de la Plataforma Renfe, instaron ayer al Ayuntamiento a recortar los plazos y sacar ya el plan a exposición.