El 27,7 por ciento de los jóvenes extranjeros de entre 0 y 15 años en la provincia de Alicante viven en el umbral de la pobreza, según un informe de la Diócesis de Orihuela-Alicante.
Con motivo de la Jornada Mundial del Emigrante y el Refugiado, el próximo fin de semana, la Diócesis ha dado a conocer este documento sobre la situación de los menores de 15 años foráneos que residen en la provincia alicantina.
Refleja que este colectivo representa el 18 por ciento del total de jóvenes de Alicante, una cifra superior tanto a la media española (11,9%) como valenciana (15).
Por nacionalidades, los niños y niñas marroquíes son los más numerosos con 9.940 jóvenes, seguidos muy de cerca por los británicos (9.607) y, más lejos, por los rumanos (5.505).
Por zonas geográficas, el mayor aumento de jóvenes en los últimos siete años lo ha protagonizado el continente africano, al pasar de 6.724 menores en 2007 a 13.938 en 2013 mientras que, por el contrario, los niños americanos caen a casi la mitad: de 12.980 a 7.104.
"Hay que tener en cuenta que los extranjeros, particularmente los provenientes de países no comunitarios, aunque no exclusivamente, son los que más sufren el desempleo y registran mayores porcentajes de desahucios", alerta el documento.
La falta de trabajo suele perpetuarse con las consiguientes dificultades para la regularización de la situación administrativa, lo que afecta directamente a los menores al causar "tanta inestabilidad familiar y emocional".
"Esta realidad nos coloca en un escenario en el que los menores están expuestos a la vulnerabilidad económica y social vinculada con la actual crisis económica y, por todo lo expuesto, son los hijos e hijas de familias extranjeras quienes tienen más probabilidades de estar en riesgo de pobreza o exclusión social", según el informe.
La Diócesis apunta que la tercera parte de la población extranjera entre 0 y 15 años carece de certificado de registro o permiso de residencia, pese a que en los últimos siete años la situación ha mejorado, al caer la tasa en un 24 por ciento.
La formación más allá de la primera fase de escolarización obligatoria también es un elemento a tener en cuenta, para la Diócesis Orihuela-Alicante, ya que pese a que el alumnado extranjero en el curso 2012-13 representa el 13,08 por ciento sobre el total del matriculado en la provincia (la media española es del 9,43%) resulta "llamativa la reducción del alumnado en el nivel de bachillerato y ciclos formativos".
"Menos de dos alumnos de cada cuatro que cursan la ESO acceden a estos niveles, con la consecuente falta de oportunidades que conlleva la imposibilidad de una mayor y mejor formación", advierte el documento.
En la mayor parte de los casos, el origen de este abandono de los estudios se halla en las dificultades económicas que afrontan los padres.
