La UA se vuelca en los proyectos europeos financiados por el plan 2014-20

En una entrevista concedida a la agencia EFE, el rector de la UA, Manuel Palomar, ha afirmado que la institución cuenta con un elevado número de grupos preparados para formar parte de estos proyectos consorciados y "de gran envergadura" en los campos científico, tecnológico y de cooperación.

Palomar calcula que entre 2.000 y 4.000 de los 77.000 millones de euros del programa hasta 2020 podrían recalar en investigaciones realizadas en la Comunitat Valenciana y ha proseguido que en la UA hay "personas formadas y con condiciones".

A este respecto, ha continuado que los grupos de la UA cuentan con una dilatada experiencia a partir de lo realizado en el VII Programa Marco comunitario, y ha puesto como ejemplo que actualmente hay más de 550 colaboradores internacionales dentro de proyectos con 104 países de los cinco continentes.

Asimismo, la UA tiene en marcha 16 proyectos Tempus (programa europeo para fomentar la cooperación en el ámbito de la educación superior o universitaria) y ha ejecutado más de 80, a lo que se une que hay una oficina de gestión de proyectos internacionales y de transferencia de resultados de investigación.

"Estamos preparados", ha recalcado el rector, "con nuestro "know how" (en inglés "saber cómo") para el reto de los próximos siete años porque ésta es la clave para la Universidad de Alicante".

Esto es así porque los recursos económicos provenientes del plan "Horizonte 2020" permitirán mantener la investigación y seguir creciendo en infraestructuras tecnológicas y científicas para, a su vez, generar empleo, negocio y seguir contribuyendo al bienestar social y cultural.

En su primer año y medio de mandato al frente de la UA (fue elegido en mayo de 2012), Palomar ha compatibilizado el cargo con las presidencias de la Conferencia de Rectores valencianos (donde el próximo día 1 le sustituye el rector de la UJI de Castellón, Vicent Climent) y de la Xarxa Vives.

En este periodo "muy intenso" se ha centrado en el análisis de la situación financiera de la UA para alcanzar la estabilidad económica.

Para ello ha emprendido una política económica de "prudencia" y "contención del gasto" con el objetivo de "garantizar los servicios mínimos de la universidad y mantener la calidad y el servicio a los estudiantes".

Ha indicado que la deuda de la Generalitat Valenciana con la institución se eleva a más de 220 millones de euros, al sumar la que se arrastra desde el año 2000, que asciende a 142 millones; la reciente (de 2013) de 46; la creada por no aplicar el plan plurianual de financiación de 27; y por último la relacionada con los intereses generados por la forma de pago, que asciende a 6 millones.

Pese a esta cifra, Palomar ha precisado que el Consell valenciano ha transferido a la UA la cantidad que acordó y reflejó en los presupuestos de 2013.

Esta financiación insuficiente se traduce en que no se puedan emprender las inversiones previstas para creación o adecuación de instalaciones, y en que tanto los grupos de investigación como los estudiantes tengan los recursos "limitados" en su día a día.

La última subida de las tasas ha agravado la complicada situación de muchos alumnos, ya apremiados por la coyuntura económica, ante lo cual la UA mantendrá sus "ayudas de emergencia", que el pasado año ya se doblaron hasta alcanzar los 1,5 millones de euros para movilidad, estudios y otros fines urgentes, principalmente.

Palomar ha destacado que "un volumen importante" de alumnos tienen problemas de dinero y ha asegurado que, con muchos, se hace un estudio "ad-hoc" para facilitar los pagos.

La UA ha observado que el incremento de las tasas no se traduce en un aumento de recaudación para la comunidad autónoma dado que los estudiantes a partir de segundo curso se matriculan de "muchos menos" créditos.

De esta manera, se mantiene el número de estudiantes (los de primer curso están obligados a matricularse del primer curso completo) pero cae la recaudación.