La provincia de Alicante ha dejado de ser la cuarta más poblada de España al verse superada por Sevilla, según los datos definitivos de población residente a 1 de enero de 2013, publicados hace unos días por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La cifra oficial de habitantes de la demarcación alicantina es de 1.854.244, frente a 1.936.703 de la sevillana. La diferencia, además, se ha incrementado a lo largo de este año, ya que el dato provisional a fecha de 1 de julio arroja un descenso de 2.196 personas en la provincia de Alicante en relación a enero, y de sólo 100 en Sevilla. Así, este cambio en el «ranking» por número de habitantes parece duradero.
Según estas cifras, la provincia alicantina tenía al comenzar este año 89.666 habitantes menos que al inicio de 2012. De esa forma, la población regresa a la existente en 2007, justo antes del inicio de la crisis. No obstante, cabe matizar que el recuento de población residente es una variable demográfica introducida por el INE este mismo año, diferente a la del padrón de habitantes, por lo que los datos no son del todo comparables. A grandes rasgos, y a partir de la explicación de este concepto que ofrece el organismo estadístico, puede deducirse que la población residente es un cómputo más exacto de habitantes, ya que recoge el número de personas que efectivamente pasan la mayor parte del año en ese territorio.
Con ello, existe un importante desfase entre ambos recuentos demográficos. Al inicio de 2013, la diferencia entre la población residente y el padrón de habitantes es de 86.622 personas a favor de este último. Eso sí, la cifra del padrón es provisional; la definitiva se conocerá en muy pocos días. En cualquier caso, la población residente es el dato que se transmite como oficial a nivel internacional a todos los efectos, según explicó el propio INE en el momento de hacer públicas las cifras.
La divergencia tan abultada que se produce en la provincia de Alicante entre la población residente y el padrón no se da en otras demarcaciones. Puede tomarse el mismo ejemplo de Sevilla, donde el padrón a 1 de enero de 2013 da de manera provisional 1.939.625 habitantes, apenas 3.000 más que la población residente. Esto puede explicarse en buena medida por el hecho de ser Alicante un territorio con una fuerte inmigración, con el factor añadido de los residentes por motivos de tipo más turístico u ocioso. En estos colectivos de población ha podido haber un importante número de personas que, tras empadronarse en un determinado municipio, han dejado de residir en él pero no han tramitado la correspondiente baja, por lo que han seguido figurando como habitantes del mismo sin realmente serlo. Este fenómeno ha sido citado en algunas ocasiones desde el ámbito académico.
Con ello, puede decirse que la población residente da una mayor precisión que el padrón. No obstante, no desglosa datos por municipios. Éstos se conocerán en breve, quizá ya en los primeros días de 2014. Las cifras definitivas a 1 de enero de este año permitirán comprobar si ese desfase se mantiene.
