La Asociación Provincial de Hoteles de Alicante -57 establecimientos y diez mil plazas repartidas por 15 municipios alicantinos- reclamó ayer al Consell y la Diputación que exijan, a su vez, al Gobierno central (Ministerio de Fomento), que ponga fin al aislamiento que sufre, tanto ferroviario como viario, el aeropuerto de Alicante y Elche del resto de las localidades de la provincia, lo que resta competividad turística a la Costa Blanca. Justo, además, en el año en el que el aeródromo ha superado la crisis de tráfico que sufrió en 2012 y se dispone a cerrar el año con cerca de 10 millones de pasajeros -8,6 millones hasta octubre-, lo que representará un crecimiento del 10% sobre 2012.

La reclamación de la asociación provincial de hoteles llega, por otro lado, en un momento especial, tras el paso adelante que han dado los hoteleros para atraer turistas a la provincia con el lanzamiento de la campaña que regala con la contratación de la habitación visitas guiadas a Alicante y degustaciones. Los hoteleros consideran que la Administración tiene que aportar ahora su parte.

La asociación trasladó ayer que «sigue sin entender cómo es posible que las comunicaciones del aeropuerto, tanto con la ciudad como con otros destinos de la provincia, sean tan escasas y en algunos casos inexistentes», por lo que la patronal exhortó a «las distintas administraciones, tanto provinciales como autonómicas, a que ejerzan la responsabilidad que tienen adquirida y reclamen con contundencia la mejora de estas infraestructuras de comunicación, al objeto de que la cadena de valor turística no se vea perjudicada por esta importante deficiencia».

Un informe del Instituto de Estudios Turísticos de la Provincia de Alicante (Ineca), lo dejó claro hacer unos mees. Si no se actúa con rapidez en la mejora de los accesos viarios al aeropuerto, éstos se colapsarán a partir de 2015, cuando se espera que el aeródromo alcance los 11 millones de pasajeros.

Los empresarios urgen, además de la duplicación de la N-338, con nuevos accesos a IFA y el propio aeropuerto, la prolongación del tranvía, la conexión del apeadero ferroviario de Torrellano con la terminal (doscientos metros separan a ambas infraestructuras), y la construcción de una plataforma para un bus-guiado (similar a lo que el Consell hizo en Castellón) que conecte el aeródromo con Torrevieja.

Según Ineca, el aeropuerto alcanzará los 14 millones de pasajeros en 2020, a los que se uniría el millón de visitantes de IFA cuando el recinto ferial culmine su ampliación. Cifras que no parecen excesivas a lo largo de todo un año pero que, según los autores del informe, se concentrarían en fechas concretas, de ahí que la N-338 actual (carretera que conecta la N-332 en la costa con la A-7) quedaría colapsada en días clave como las 70 jornadas fines de semana y festivos.