La lucha emprendida por la concejalía de Seguridad contra el botellón en la zona del golf de la Playa de San Juan se ha reforzado con los controles de alcoholemia que se emprendieron hace medio mes y que se repetirán a lo largo del verano. El edil de seguridad, Juan Seva, se muestra seguro de que el botellón en esta zona «va a quedar en algo residual». Por el contrario, la Plataforma contra el Botellón afirma que las medidas son insuficientes y anuncia la recogida masiva de firmas para denunciar las molestias al vecindario.
El concejal de Seguridad asegura que, con las medidas puestas en marcha por el Ayuntamiento, ya se ha conseguido reducir sensiblemente el botellón en la zona del campo de golf y se muestra convencido de que en las próximas semanas quedará reducido a la mínima expresión.
Así, la medida de imposición de sanciones a los jóvenes por el consumo de alcohol en la vía pública, que se aplica desde primeros de julio, deparó como resultado el fin de semana del 3 y 4 de agosto 75 multas de 90 euros, con lo que ya se han impuesto casi 500 este verano en la zona.
La novedad, desde hace medio mes, son los controles de alcoholemia. Según los datos facilitados por el edil del PP, en la noche del viernes 2 al sábado 3, se hicieron un total de 59 controles en la avenida de las Naciones y en la avenida de Denia con un balance positivo puesto que sólo en dos casos se superaba el valor mínimo de 0,25, aunque sin rebasar el de 0,60, por lo que sólo se impusieron dos sanciones administrativas. Seva señala que la presencia de jóvenes en la zona para la práctica del botellón se ha reducido notablemente y anuncia que las medidas proseguirán hasta conseguir su reducción al mínimo.
No son tan optimistas los vecinos de la zona agrupados en la Plataforma contra el Botellón, ya que según su presidente, Ramón Montahud, «los vecinos estamos cabreados porque hay presencia policial pero muy escasa» e incluso hay zonas como la Prolongación de la avenida de las Naciones «donde no se actúa y aunque están en una zona sin viviendas, al regresar, medio trompas, arman el follón en las zonas residenciales». Montahud señaló que se están recogiendo firmas de vecinos para denunciar esta situación y exigir más rigor al Ayuntamiento.
