Fueron una triste estampa en el barrio de Benalúa durante más de diez años. Pero estos días, las excavadoras se están llevado el último recuerdo de los barracones en los que estudió toda una generación de alumnos del CP Benalúa. El solar del antiguo centro escolar ha permanecido vallado desde que en febrero de 2011 se inauguró el nuevo colegio y poco después los barracones eran desarmados. Sin embargo, aún quedaban los grandes cimientos de estas estructuras metálicas. Tras mucho insistir los vecinos, una empresa privada, por encargo del Ayuntamiento, está limpiando en los últimos días por completo el solar, llevándose estos anclajes.

Ahora, las asociaciones de vecinos de la zona piden que se saque provecho a este solar, que ocupa una manzana completa en pleno corazón de Benalúa. «Hemos pedido una reunión con el Ayuntamiento para ver qué proyectos podrían desarrollarse en este espacio, por ejemplo pistas de pádel o del fútbol», explica Juan Bernabeu, presidente de Movimiento por Benalúa. Los vecinos también creen que se podría aprovechar la antigua casa del conserje que aún permanece en pie «para construir un centro social, ya que el que estaba proyectado para el barrio está paralizado».

Para Bernabeu, «es un desperdicio que se quede este solar sin ningún tipo de uso». Ahora, lo que más temen «es que el Ayuntamiento venda esta parcela y que al final el barrio la pierda». Por eso, piden «un poco de respeto para el barrio, que ya nos han hecho mucho daño con proyectos prometidos que al final se han quedado en nada, como el del centro de salud». Desde la Asociación Movimiento por Benalúa también se ha solicitado al Consistorio que sanee los árboles de la parcela «que están con bichos y medio secos por falta de cuidados».

Por su parte, la Asociación El Templete también reclama un uso público para la parcela que ocupaba el antiguo Colegio Público Benalúa. «Hemos pedido que se destine, por ejemplo a instalar un campo de fútbol o una zona deportiva para los vecinos», explica Isabel González, presidenta de El Templete. González también ha solicitado «que la antigua vivienda del conserje sea cedida a las asociaciones para que podamos celebrar allí nuestras reuniones».

Por parte del Ayuntamiento, el concejal Andrés Llorens señaló que las obras que se han emprendido en el antiguo centro escolar van dirigidas a cumplir la petición del colectivo «Movimiento por Benalúa», consistente en habilitar este espacio como una plaza pública. El edil de Atención Urbana explicó que se trata de una actuación directa del Ayuntamiento que llevan a cabo conjuntamente su concejalía y la de Urbanismo, con la concejala Marta García Romeu al frente.

Sobre el proyecto a ejecutar, Llorens dijo que ya se ha concluido la explanación de los terrenos y que a continuación se acometerá la ejecución de la plaza. El concejal dijo que se trata de una obra modesta, ante la actual situación económica municipal, pero confía en que satisfaga a los vecinos.

«Va a ser una plaza tradicional», señaló el edil, indicando que dispondrá de arbolado para proyectar sombra, así como mobiliario urbano, especialmente bancos, y una pista deportiva de petanca, que es la petición que le formuló la asociación de vecinos.

Plaza Gabriel Miró

A preguntas sobre la plaza de Gabriel Miró, cuya renovación ha sido paralizada por el Ayuntamiento tal como señaló este periódico el pasado sábado, el concejal de Atención Urbana lamentó haber tomado la decisión de suspender los trabajos que se preveían llevar a cabo en las próximas semanas, consistentes fundamentalmente en la reordenación de las zonas verdes y de la jardinería. Llorens dijo que no ha tenido más remedio que tomar esta decisión y aplazar esta actuación en la emblemática plaza del centro tradicional ante la imposibilidad de hacer frente en estos momentos a los más de 80.000 euros en los que están presupuestados los trabajos que se iban a realizar.