La directora general de Comercio y Consumo, Silvia Ordiñaga, ha informado que las Juntas Arbitrales de Consumo (JAC) de la Comunitat Valenciana han recibido este primer semestre del año un total de 2.334 solicitudes planteadas por los consumidores, un 24 por ciento más en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Del total de solicitudes, 334 se presentaron ante la JAC de Castellón, 338 ante la JAC de Alicante, 303 ante la JAC de Benidorm y 1.359 ante la JAC de la Comunitat Valenciana. De la cifra total, 493 se resolvieron mediante mediaciones previas, según ha informado la Generalitat en un comunicado.

Además, se celebraron 859 audiencias --563 en la JAC de la Comunitat Valenciana, 114 en la de Castellón, 53 en Benidorm y 129 en Alicante--, y se dictaron 820 laudos --538 emitidos por la JAC de la Comunitat Valenciana, 106 por la de Castellón, 53 por la de Benidorm y 123 por la JAC de Alicante--.

Por otra parte, el número de empresas adheridas al sistema de arbitraje suma un total de 26.714 (16.466 a la JAC de la Comunitat Valenciana, 1.990 a la de Castellón, 2.196 a la de Benidorm y 6.062 a la de Alicante). Estos datos indican que durante el primer semestre del año 78 empresas se han adherido al Sistema Arbitral de Consumo para resolver las reclamaciones.

Alternativa a los tribunales ordinarios

La Junta Arbitral de Consumo es un organismo que funciona como vía alternativa a los tribunales ordinarios y que resuelve los conflictos derivados del consumo en un plazo máximo de cuatro meses, contados a partir de la designación de los árbitros.

Se trata de un sistema alternativo a la vía judicial al que se puede acudir para resolver conflictos que puedan surgir entre consumidores o usuarios y empresarios, comerciantes o prestadores de servicios. Es un servicio vinculante y ejecutivo, rápido, voluntario, sencillo, imparcial, eficaz y gratuito tanto para la parte demandante como demandada.