La dirección local del PSOE decidió ayer, en una ejecutiva convocada de urgencia, expedientar a cuatro concejales que desafiaron la directriz del partido y decidieron abstenerse en la moción que EU elevó ayer al pleno pidiendo rehacer desde cero el Plan General, bajo sospecha tras la anulación del Plan Rabasa. La dirección del partido planteó votar en contra, pero María José Adsuar, Alejandro Parodi, Elena Martín y Gabriel Moreno no lo hicieron. Se abstuvieron. En el caso de los dos últimos, que ya tienen abierto un expediente anterior, la ejecutiva va más allá al haber acordado por unanimidad pedir a la dirección provincial que reclame a Madrid su expulsión provisional del partido hasta que se resuelvan los expedientes.

Una suspensión de militancia podría arrastrar a ambos al grupo de concejales no adscritos, aunque eso está por ver. Los díscolos se escudan en que son mayoría dentro del grupo municipal -cuatro contra dos, teniendo en cuenta los dos ediles que hay de baja médica- y esgrimen que quienes rompieron la disciplina de voto del grupo municipal ayer fueron el portavoz, Miguel Ull, y la edil Loles Fernández al votar en contra de la propuesta de EU siguiendo los dictados de la ejecutiva, pero no los de la mayoría del grupo municipal. Una mayoría que podrían utilizar para introducir cambios dentro del grupo municipal. La guerra está servida.

Esquerra Unida se quedó sola con su moción -el PP votó en contra con dos concejales del PSOE y otros cuatro ediles socialistas se abstuvieron junto a UPyD- en la que defendía la necesidad de partir de cero en la elaboración del Plan General, aludiendo a las sospechas de presunta corrupción que pesan sobre el documento y argumentando que la anulación de Rabasa rompe sus previsiones. Los socialistas, por su parte, presentaron otra iniciativa en la que abogan por una revisión y por introducir modificaciones a través de una tercera exposición al público, pero no partiendo de cero. Desde UPyD coincidieron en la necesidad de adaptar el plan a la realidad actual, pero también descartaron rehacerlo de nuevo.

La iniciativa del PSOE tampoco salió adelante y el portavoz de Esquerra Unida, Miguel Ángel Pavón, aprovechó para cargar contra los socialistas recriminándoles la debilidad de su iniciativa al apuntar que "no hace mención expresa ni a Rabasa ni a Brugal y simplemente hace alusión a que se revisen los aspectos bajo sospecha". Pavón acusó al PSOE de "acercar sus posturas a las del PP", recordando que el equipo de gobierno local ya ha anunciado una tercera exposición pública del planeamiento. Ayer, la portavoz del PP y edil de Urbanismo, Marta García-Romeu, volvió a ratificarlo tras descartar rotundamente una reelaboración del documento y acusar de "irresponsable y mentiroso" a Pavón. Este último, le replicó llamándola "ignorante" durante el debate acerca de la anulación de Rabasa.

Un debate que eclipsó buena parte del pleno y que EU aprovechó para recordar al PSOE que su agrupación votó a favor del plan y de su adjudicación a Enrique Ortiz en el año 2005. Después de aquello, el PSOE se rompió en pedazos y aún hoy parece no haberse recuperado. Un arma arrojadiza que utilizan tanto los demás grupos municipales como los propios socialistas. De hecho, en los tablones de los despacho de algunos de los concejales díscolos hay recortes de prensa de aquel pleno.

El PP acusa a Pavón de "lanzar piedras"

La portavoz del PP, Marta García Romeu, aprovechó una moción de EU sobre transporte para cargar contra Miguel Ángel Pavón, al que acusó de "celebrar con pedradas y violencia la llegada del AVE", en referencia a los incidentes con los manifestantes en la inauguración. Pavón, por su parte, acusó a García Romeu de "mentir" y defendió su actitud pacífica durante la manifestación. Al respecto, añadió que estudiará si toma medidas legales. El PP rechazó una iniciativa del PSOE para mantener la rebaja en los billetes del AVE hasta que se reduzca la duración del trayecto, al entender que hay errores en ella. Tampoco se aceptó la petición de UPyD de llamar a la estación Alicante-Costa Blanca, puesto que ya está bautizada como Alicante-Central.

Sí hubo unanimidad para elaborar una ordenanza de subvenciones que pidió el PSOE y para instar a la Diputación a dar más impulso a los congresos en el ADDA.

El pleno acabó con el pésame a la familia del niño fallecido en Hogueras y al presidente de la Semana Santa, Manuel Ricarte.