La apertura de la línea de Alta Velocidad entre Madrid y Málaga (24 de diciembre de 2007) catapultó la capacidad de atracción de turistas madrileños hacia la Costa del Sol, al ganar 700.000 de viajeros en un año, en comparación con el escenario inmediatamente anterior a la puesta en servicio del AVE. En concreto, el corredor Atocha-Málaga pasó del millón de pasajeros de 2007, a cerca de 2 millones anuales en la actualidad. Mientras, el tráfico ferroviario entre Madrid y Alicante se ha estancado en 1,2 millones de pasajeros al año (800.000 directos), aunque se espera un repunte espectacular a partir de 2014, cuando los trenes circulen ya sin las restricciones de velocidad entre Alicante y Albacete, por la necesidad de testar el nuevo sistema de señalización y seguridad de la vía con los trenes que se elijan para cubrir el servicio.

La Costa del Sol lleva ya cinco años a 2 horas y 20/50 minutos de viaje en tren directo desde Madrid y eso se nota. La llegada al Ministerio de Fomento de la malagueña Magdalena Álvarez aceleró el proyecto Madrid-Córdoba-Málaga (actuación que se planificó una vez anunciada la construcción del AVE entre Madrid y la Comunidad Valenciana en 2001) y los resultados no se han hecho esperar dotando a la Costa del Sol (gran rival de la provincia en el mercado nacional) de un elemento que le hace ser más competitiva.

El viaje en tren de Madrid a Málaga se redujo en 1 hora y 17 minutos y Renfe ofrece 11 servicios diarios en cada sentido con una media de 4.200 plazas que aumentan hasta las 8.000 los viernes. El precio medio del billete de ida y vuelta es de 130 euros, lo que confirma que la tarifa no ha sido, en este caso, un factor que limite los viajes.

Fomento prevé que el corredor ferroviario Alicante-Madrid gane 800.000 pasajeros nuevos, prácticamente de forma inmediata, a partir de la puesta en marcha del AVE, aunque todavía sigue sin fijar precios y frecuencias. En cuanto al futuro de las comunicaciones entre Madrid y la Comunidad Valenciana, la previsión que ha mantenido siempre Fomento es que la línea facture 198 millones de euros a partir de 2014-dependerá del grado de penetración-. La cifra representará el 37% de los ingresos totales de los cuatro corredores que estarán en marcha: El enlace Madrid-Barcelona-Francia será el segundo con más ingresos -164 millones-, el Madrid-Sevilla-Málaga, con 135 millones y el eje Madrid-Valladolid con 38 millones. Si el análisis de ingresos se traslada al horizonte de 2024, la línea Comunidad Valenciana-Madrid habrá duplicado sus ingresos hasta los 410 millones anuales, por los 346 del Madrid-Barcelona y los 298 millones del Madrid-Málaga.