La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, ha considerado que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), que anula la aprobación del Plan Rabasa y la adjudicación a una empresa del empresario Enrique Ortiz, imputado en el 'caso Brugal', "hace referencia, parece ser, a una cuestión formal", y ha confirmado que el consistorio no recurrirá esta decisión. Según ha recalcado, su única preocupación es la instalación de Ikea, y ahí recurrirá "todo lo que pueda afectar" a esta posibilidad.

En un receso del pleno municipal celebrado este jueves, a preguntas de los medios de comunicación, la primera edil ha aclarado que no ha leído la resolución, si bien, ha comentado que en ella "se hace referencia, parece ser, a una cuestión formal".

La alcaldesa además ha adelantado que no prevé plantear recurso de casación contra esta sentencia. "A partir de ahí, evidentemente, quienes estén interesados que la recurran", ha añadido, en referencia al resto de las partes demandadas, entre las que se encuentran la Generalitat valenciana, así como la mercantil Viviendas Sociales del Mediterráneo SL --propiedad de Ortiz-- y la promotora Deproinmed SL.

En el mismo sentido, Castedo ha asegurado que su "única preocupación" tras la anulación del Plan Rabasa, cuyo desarrollo contempló modificaciones que incluían la implantación de Ikea, es la instalación de la multinacional en la capital alicantina, al tiempo que ha subrayado que la empresa está "dispuesta" a seguir en la ciudad. "Recurriré todo lo que pueda afectar a Ikea, en este caso no le va a afectar, y lo que voy a hacer es trabajar para que la instalación en la ciudad sea cuanto antes", ha aseverado.

Ante la insistencia de los periodistas sobre su valoración de la resolución del TSJCV, ha indicado que puede "hacer muy poca", ya que todavía no ha leído la sentencia, si bien ha agregado que aunque la lea "tampoco" entraría a valorarla. "Mi preocupación y la de mi equipo de Gobierno es la instalación de Ikea en esta ciudad", ha insistido.

Del mismo modo, ha confirmado haber hablado con representantes de la empresa, quienes, tal y como ha resaltado, "han mostrado su predisposición a seguir apostando por Alicante". "Esa es la única preocupación que tenemos, ninguna más", ha incidido.

En cuanto a si se barajan otros emplazamientos distintos a la de la zona de Rabasa, ha indicado que "todos", tras lo que ha recordado que "en su momento se plantearon otras" localizaciones, y ha reiterado que "cualquier ubicación que sea factible para que Ikea exista en la ciudad claro que está a disposición, esa es la única preocupación del equipo de Gobierno, y, además, cuanto antes".

ESTUDIAR OTRAS LOCALIZACIONES

Castedo ha considerado que si Ikea "sigue mostrando su disposición" a estar en la capital alicantina, también entiende que "está dispuesta a estudiar cualquier otra propuesta que se pueda plantear". "Tienen interés en estar en la ciudad, la ciudad tiene mucho interés en que ellos estén aquí y ahora es una cuestión de trabajar, además a marchas forzadas, porque creo que hay cosas que no deben demorarse más en el tiempo y desde luego una de ellas es la instalación de Ikea", ha recalcado.

Interrogada sobre el interés de la mercantil en mantenerse en Rabasa, ha pedido a los medios de comunicación que se le permita "hablar con ellos", sentarse y tomar "la decisión que se tenga que tomar". "Lo que quiero es que la instalación sea cuanto antes, de verdad, ellos decidieron ese suelo, fueron ellos, porque les interesaba por las conexiones", ha añadido.

"Interés de Ikea sí que sigue existiendo por la ciudad, así como interés de este equipo de Gobierno para que se instale cuanto antes, y que, evidentemente, sea en una ubicación consensuada. Claro que pueden existir otras --localizaciones-, y quiero que sea en la que se tarde, si puede ser, diez días en lugar de 20", ha enfatizado.