La presión que han ejercido los docentes interinos afectados por la decisión de Educación de primar las mejores calificaciones en las oposiciones antes que la experiencia laboral, ha surtido cierto efecto. Ayer la conselleria rectificó la nueva normativa parcialmente, introduciendo un cambio significativo: donde dijo que los contratos acabarían el 30 de junio, ahora decide prolongarlos los dos meses de verano también, como al resto de los funcionarios docentes.
Además de esta medida, apuesta también por mantener en la bolsa de trabajo a aquellos con más años de experiencia que hayan trabajado desde el año 93, con más de 60 años de edad; y se apunta a una reordenación de las bolsas conforme tengan lugar oposiciones futuras, teniendo en cuenta de alguna forma la experiencia y no solo las mejores notas.
En un primer análisis de los cambios introducidos al acuerdo de interinos, los sindicatos respondieron con precaución. Desde la formación mayoritaria del STEPV, Marc Candela advirtió que lo considera "insuficiente" y que se mantiene la huelga convocada desde el día 20 al 27 de marzo "porque además nos chantajean con la postura de que si no se firma este nuevo acuerdo, volverán a los postulados más radicales de expulsar de la lista a quienes no hayan aprobado una oposición".
Por parte de CC OO, Francisco García, que junto a la Coordinadora de interinos tomaba ayer por la tarde el pulso a los docentes en Elche, señaló que "la Administración sigue sin contar con el crédito del profesorado, porque ha querido cambiar de golpe un acuerdo válido durante los últimos 22 años. Los docentes no confían ahora en que cumpla con lo que dice".
Error
Laureano Bárcenas, presidente de ANPE, dijo que el nuevo documento "es un reconocimiento del error por parte de la Administración de su primera propuesta, con inaceptables condiciones para el personal interino afectado", y añadió que convocará a sus afiliados para valorarlo "y decidir las actuaciones a seguir".
Con lo que ningún sindicato está de acuerdo es con asumir como suyo el compromiso de firmar un documento mejor que el anterior pero insuficiente "ante una administración que demuestra ser incumplidora de sus palabras. Detrás de esta orden hay familias con dificultades serias y de un día para otro no se pueden convocar unas oposiciones con cambios tan importantes para los que se deben presentar, porque hasta diciembre la consellera dudaba de que se fueran a sacar plazas", añade García.
Las primeras asambleas de docentes interinos afectados, celebradas ayer por la tarde en Elche, y la Vega Baja, volvieron a rechazar como hicieron antes en Alicante los postulados de Educación. "Es un sinsentido hablar de seleccionar a los mejores cuando el sistema educativo lo han sacado adelante los que están en él".
"El viernes no puede cerrarse, sería todo un chantaje"
"El viernes no puede cerrarse un acuerdo tan repentino que se rectifica en parte y sobre el que se nos dice que se vuelve al postulado inicial si no firmamos todos. No se puede chantajear de esta forma al colectivo de los docentes. Exigimos moratorias, porque no asumimos que se lleven a cabo los cambios en esta próxima oposición. Al menos hay que esperar hasta el curso que viene". La reflexión de los representantes de CC OO era compartida a voces entre los asistentes a la asamblea celebrada en Elche ayer mismo por la tarde. Que la experiencia laboral vuelva a ser considerada no acaba de convencer a un colectivo que se veía en la calle hace dos días. "Lo han dicho de palabra, que en lugar de expulsarlos se les reordenará cuando haya una convocatoria de oposición, y que los que tengan una oposición aprobada subirán a los primeros puestos de la lista como fijos e inamovibles", aproximadamente 5.000 de los docentes interinos. De esta forma, los que aprueben futuras oposiciones y no obtengan plaza, se situarían arriba en la lista laboral, y el resto quedarían reordenados según los ejercicios aprobados y la nota obtenida. El director general de Personal, Santiago Martí, ha presentado el nuevo texto y ha hecho saber que ésta es la última propuesta que hace la Administración. Los sindicalistas siguen exigiendo compromisos de oferta futura de plazas y una planificación al respecto "para no tener a la gente en un sin vivir". Y reclaman la exclusión del acuerdo de los 1.900 profesores de enseñanzas especializadas y de FP que no han tenido oposiciones en décadas porque no se les ha dado oportunidad. V. B.
