Alrededor de 300 profesores interinos se concentraron ayer ante las puertas de la sede de Educación en Alicante mientras otro grupo se encerraba en las dependencias para protestar contra el cambio en las bolsas de trabajo que quiere introducir la conselleria relegando la experiencia laboral frente a la nota que se obtenga en las oposiciones a partir de ahora. Reunidos tras una gran pancarta en la que podía leerse "Más derechos para los interinos. Educación de calidad", los manifestantes entonaron una sonora pitada para reclamar a los responsables educativos que retiren la reorganización de las bolsas de trabajo después de veinte años de vigencia.
"Pretenden chantajearnos y con la excusa de recortar gastos, quitarse de encima a una parte del profesorado que será sustituido por otro peor pagado y más dócil. Se va a perjudicar tanto al docente desplazado como a los escolares", denunciaban los congregados. Entre los delegados sindicales que respaldaron la protesta, Ignasi Amorós replicaba que la excusa de que trabajen los mejores se contradice con los que llevan 20 años haciéndolo bien.
