Durante el recreo prefieren innovar en el laboratorio hasta lograr la destilación del vodka, participar en todos los frentes posibles hasta representar al centro como diputado del parlamento y debatir sobre las centrales nucleares, o enfrascarse en el diseño de un coche teledirigido que se controla a partir de los impulsos musculares.

Son alumnos con altas capacidades en el Instituto Bahía de Babel, que renuncian de buena gana al descanso entre clase y clase porque les entretiene enfrascarse en proyectos de alto nivel, aunque por lo demás sigan las clases como el resto de sus compañeros.

«Son programas de enriquecimiento y excelencia, diseñados en el centro para motivar y desarrollar el potencial de estos alumnos que son el futuro de todos nosotros», apunta la profesora Charo Moya, orientadora del instituto que vive como suyos los triunfos de estos estudiantes.

CHARO MOYA PÉREZ

ORIENTADORA

"La mente se va perfeccionando si se entrena y se trabaja. Estos alumnos tienen un gran potencial si se desarrolla"

SOBRE LA MEDIA

Con una capacidad intelectual superior a 130, en el conjunto del instituto apenas suponen el 2% del alumnado, pero los programas curriculares elaborados para ellos arrastran a otro 20% de compañeros que tienen una capacidad intelectual de 115 o 120, también por encima de la media que está establecida entre 100 y 110.

«El concepto de alumno superdotado es mucho más amplio que la capacidad intelectual, no se limita al talento académico sino que abarca la capacidad de liderazgo o la artística, cuestiones muy necesarias en nuestro país con la que está cayendo», apunta la coordinadora de los programas de diversificación.

Aunque estos programas específicos se aplican desde primer curso de la ESO, en cuanto llegan desde el colegio, ninguno de los protagonistas los ha percibido hasta llegar a tercer curso. Dicen que se encuentran muy a gusto en el centro, algo que no les sucedía antes. «El cambio fue muy grande. Me aburría en el instituto anterior mientras aquí los profesores están muy implicados y dedican horas extra para preparar proyectos que dan más contenido a las mismas asignaturas que cursan el resto de los compañeros«, reconoce Lucas Gil, en primero de Bachillerato.

LUCAS GIL

PRIMERO DE BACHILLERATO

"Además de las clases diarias trabajo en un proyecto de bioingeniería con un coche teledirigido por el impulso de los músculos"

Está entusiasmado con un proyecto de Bioingeniería que prepara con la Universidad de Valencia para diseñar un coche teledirigido que se mueve a impulsos de los músculos: «Le aplicamos la fórmula del electrocardiograma, pero en este caso con el músculo de la mandíbula aceleramos, y apretando y tensando los brazos lo movemos a derecha e izquierda».

El proyecto lo ha expuesto esta semana para el conjunto de la comunidad educativa con motivo de la semana cultural del instituto, que hace unos días celebró una jornada de puertas abiertas.

Raúl Zaragoza, en segundo de Bachillerato, dice que apenas notó nada extraordinario en primero y segundo de la ESO que le motivara, pero que a partir de tercero se dio cuenta de que se interesaba por muchas más cosas que sus compañeros. Charo, la psicopedagoga, interviene con una sonrisa para recordar que «Raúl era muy caótico cuando llegó. Muy capaz, con un gran potencial, pero ha necesitado de mucha orientación para desarrollar sus expectativas porque si no se habría aburrido, repetido curso e incluso abandonado los estudios. Ha madurado mucho pero al principio había que llamarle al orden porque la Secundaria tiene normas muy cerradas y no se pueden saltar. Ha costado que asuma cosas que no son negociables, pero al abrirle el abanico de oportunidades ha despegado».

RAÚL ZARAGOZA

SEGUNDO DE BACHILLERATO

"Como si fuera un diputado más, he debatido en el Parlamento nacional sobre la energía nuclear. Voy a ser jurista"

Los profesores le motivan examinándole de Historia y de Filosofía en francés, idioma en el que le habla su madre desde pequeño, pero lo que más le fascina es participar en público. Debatió sobre la energía nuclear en el parlamento nacional y actuó como moderador entre sus compañeros. Ahora prepara las olimpiadas de Castellano mientras aspira a ser jurista en cuatro años con la carrera doble de Derecho Hispano-francés en la Complutense.

A Marina lo que le encantan son las olimpiadas de ciencias puras, en las que ya ha sido premiada por un proyecto en Ingeniería Química sobre la destilación del vodka destilación del vodka. El laboratorio es su sitio preferido y quiere especializarse como forense. «Asisto a clase como cualquiera pero hago otros proyectos extra con los profesores que te identifican y te hacen pensar».

MARINA GARCÍA GÓMEZ

SEGUNDO DE BACHILLERATO

"Me gusta estar en el laboratorio y participar en certámenes de ciencias puras. He obtenido un premio por la destilación del vodka"

LA ACTUALIDAD

Entre los recortes y la corrupción política

«Esta sociedad sale adelante por las familias, porque ni el gobierno ni los que están en la cabecera hacen nada, ni para bien ni para mal, aunque más bien para mal». Marina es hija de funcionaria y de autónomo, y dice vivir de cerca en casa las repercusiones de las retenciones económicas a sus padresretenciones económicas: «No me gustan ni tanta corrupción ni tanto recorte», sentencia. Lucas, a sus dieciséis años, dice estar muy interesado por la situación del país y también es hijo de funcionarios: «Las medidas que se están adoptando no son adecuadas para el momento que atravesamos. Hay que invertir para solucionar el paro y no empeñarse en bajar el déficit. Se hace con intención de ayudar pero viene impuesto por otros países, y son decisiones que nos afectan para mal». No obstante sus palabras, no se queda en la crítica y admite que «otras veces estos mismos países nos han ayudado. Cuando éramos más pobres Alemania nos dio dinero y ahora nos toca devolver el favor, aunque espero que no dure mucho tiempo». Raúl valora que «a pesar de los recortes, los profesores sigan implicados como el primer día». Lo que ya no le gusta tanto es «el desprestigio de la imagen de Españadesprestigio de la imagen de España en otros países por culpa de la corrupción política», porque lee la prensa francesa y alemana, aunque acaba optimista: «La esperanza es lo último que se pierde».

LA CIFRA: 130

Capacidad intelectual del alumno con un talento superior

Desde que llegan al centro, el equipo de Orientación diagnostica a los alumnos y toma nota de aquello en lo que destacan para dirigirles hacia distintos programas específicos.