La indignación de gran parte de la sociedad ante las políticas actuales del Gobierno central y la Generalitat volvió ayer a ponerse de manifiesto en Alicante y en otras ciudades como Elche, Torrevieja y Elda. Miles de personas salieron a la calles, especialmente a las de la capital, para mostrar una vez más su rechazo a los recortes en servicios y prestaciones sociales, así como a la corrupción en las instituciones. La provincia se sumaba así a la convocatoria nacional de la "Marea Ciudadana" y, además de hacer patente la indignación social, reivindicaba una gestión política que tenga más en cuenta a los ciudadanos.

En Alicante, la Policía Nacional cifró los asistentes en 2.500. Desde la organización no se facilitó ningún dato oficial concreto, aunque algunas fuentes apuntaban que se habían congregado 10.000 personas. En cualquier caso, la imagen que se observaba mostraba claramente una afluencia notable, de varios miles de personas, mayor de la registrada en otras protestas llevadas a cabo en los últimos meses. De hecho, cuando la cabecera de la manifestación se dirigía ya por la Rambla hacia el punto final en la Explanada, la cola todavía salía del arranque en la plaza de la Montañeta. Allí, la marcha se había iniciado con una cadena humana alrededor de la Subdelegación del Gobierno, al grito, entre otros, de "¡Que no, que no nos representan!". La estampa se repitió después, en la Torre de la Generalitat.

"Marea ciudadana por la libertad, por la democracia, por los derechos sociales y ambientales, contra el pago de la deuda ilegítima", rezaba la pancarta principal. Pero además, numerosos colectivos echaron mano de lemas y reivindicaciones, como la Associació en Defensa de la Sanitat Pública del País Valencià, la Plataforma en Defensa de la Ley de Dependencia o el Colegio Oficial de Trabajo Social, entre otros muchos. Asimismo, muchas banderas republicanas -más que otras veces- y gritos contra Iñaki Urdangarin, así como al resto de formas de corrupción. "Esos chorizos, que nos devuelvan el pan", coreaban unos, mientras que otro asistente portaba consigo un cartel con una fotografía de Mariano Rajoy, donde podía leerse "Mamá, he sacado un sobre", al tiempo que otro exigía: "Fuera la carroña política".

Al terminar la manifestación se leyeron varios discursos, en los que se denunció la "corrupción y pérdida de legitimidad" de las instituciones, así como el "ataque a la sanidad, la educación pública y los derechos sociales". También se criticó que la Generalitat tenga "dinero para los clubes de fútbol y los derechos privados, mientras a la ciudadanía se le quiere quitar todo". No obstante, el más duro fue el portavoz de la Plataforma por la Ley de Dependencia, Miquel Martorell, quien exigió "la dimisión de la ministra Confeti [en alusión a Ana Mato] por su incapacidad". Un grito al unísono de "Ana Mato, dimisión", repetido varias veces, acompañó el final de esta intervención.

En otros puntos de la provincia

En Elche, 700 personas, según fuentes policiales (unas 2.000 según la organización), participaron en la "Marea Ciudadana", según informa Mar Alberola. Se inició en la plaza de los Algeps y finalizó ante el Ayuntamiento. Una gran pancarta con el lema "Marea ciudadana contra el golpe de los mercados" abría la manifestación, aunque en el trascurso de la protesta se pudieron leer otras pancartas como "Gobierno dimisión" o "La invasión de los chorizos corruptos", entre otros. Mientras, centenares de personas fueron a pie desde Petrer hasta Elda, informa Marivi Pardo. En esta manifestación se pudieron ver pancartas con lemas a favor de la sanidad y la educación Pública y la defensa de los derechos laborales, junto con alguna bandera republicana. Por último, en Torrevieja se realizó otra protesta, con los asistentes disfrazados, informa David Pamies. No faltaron alusiones al escándalo de los móviles del Ayuntamiento.

En otros puntos de la Comunidad la protesta fue también multitudinaria, con 75.000 personas en Valencia según los organizadores -12.000 según la Policía- que criticaron el "golpe de estado" de los mercados.