"Si nos ponen a dar clases por afinidad de asignaturas con los mismos grupos de 30 alumnos, no podrá disminuir el fracaso escolar. Lo único que provocará será un nuevo recorte de las plantillas docentes". La portavoz de los directores de los institutos de Secundaria de la provincia, Laura Oliva, sale al paso del anuncio de la consellera de Educación, María José Catalá, que elabora una orden para poner freno al fracaso escolar prolongando las clases de la última etapa de Primaria en los primeros ciclos de Secundaria. Se trata de que haya menos profesores especialistas por aula, agrupando a los docentes por materias afines para que el cambio para los alumnos no sea tan brusco.

"Los centros de Secundaria tenemos experiencias muy positivas entre los alumnos con dificultades gracias a los desdobles de aulas con 15 estudiantes. También integramos los contenidos de las asignaturas instrumentales, como Lengua o Matemáticas, por bloques, pero el concepto es muy distinto porque se trabaja con menos alumnos para obtener resultados de verdad". Oliva subraya que la medida que anuncia la consellera supone "añadir un recorte más de plantillas a lo bruto. Los programas de diversificación funcionan con 15 alumnos a quienes trenzamos los contenidos, pero con 30 en el aula no se puede hacer. La clave reside en que cada profesor tenga menos alumnos", insiste la portavoz.