Ya es una realidad. El recorte en las ayudas a cuidadores no profesionales de personas dependientes, que se aprobó el pasado mes de octubre, ya se ha visto reflejado en los pagos de noviembre, que la Conselleria de Bienestar Social ingresó a los afectados a finales de la pasada semana.

El ajuste autonómico supone un recorte de las ayudas de hasta un 70%, que en el caso de grandes dependientes puede conllevar unos 450 euros de pérdidas en los ingresos mensuales.

El recorte, según fuentes de la Conselleria de Bienestar, se enmarca en la adaptación a un real decreto del Gobierno central, aprobado el pasado mes de julio, que reduce los ingresos en función de la renta del discapacitado.

En la provincia de Alicante están registrados unos 9.600 dependientes con derecho a prestación. De ellos, más de 800 beneficiarios, un ocho por ciento del total, han visto reducido un 70% sus ayudas -al tener ingresos mensuales superiores a los 2.000 euros, según la Conselleria-, mientras que un 48% de los dependientes han mantenido su prestación o se la han rebajado en unos 50 euros mensuales.

Este nuevo recorte supone, según plataformas de dependientes, un nuevo golpe para los afectados, que ya vieron reducida la ayuda un 15% meses atrás y que, además, deben hacer frente al copago de los medicamentos.

El portavoz de la Plataforma en Defensa de la Ley de la Dependencia en Alicante, Miquel Martorell, aseguró ayer que los gobernantes pretenden "cortar de raíz" la ayuda a los dependientes. "Primero fue la reducción del 15% y la pérdida de cotización a la Seguridad Social, y ahora un nuevo recorte. Pueden contar la historia que quieran, pero los dependientes se sienten desplazados y desprotegidos por las autoridades", explicó Martorell, quien se mostró contundente con la política de las administraciones: "Se legisla en contra de las personas con discapacidad. Hacen todo lo posible para dificultar que las personas dependientes sean atendidas, ya sea en centros o en sus respectivos domicilios. Buscan la privatización total del servicio".

En la misma línea se mostró la Plataforma de la comarca de l'Alcoià, que denunció ayer a través de un comunicado "la crueldad, burla y atropellamiento a los derechos de los dependientes. Bienestar Social actúa de manera traidora al no informar a los beneficiarios de los salvajes recortes que se iban a producir en sus prestaciones, por lo que los dependientes no han sido conscientes hasta que no han cobrado la nómina de noviembre [cuyo pago se efectuó la pasada semana]", aseguraron representantes de la plataforma en la comarca de l'Alcoià-El Comtat.

Los afectados ya preparan actos de protesta para los próximos días. En Alicante, se prevé que los dependientes se concentren frente al edificio del PROP (Rambla de Méndez Núñez) el próximo viernes, a partir de las 12 horas, como protesta por los recortes, el retraso en el abono de las prestaciones y el copago farmacéutico.

"Van a por nosotros de manera sibilina"

"Para los políticos son números, pero ellos no saben el desgaste que supone cuidar a un dependiente". Así se pronuncia Hipòlit Agulló, padre de Pau, un joven de 13 años con parálisis cerebral de nacimiento.

La ayuda para cuidadores llegó a suponer unos ingresos mensuales de 600 euros, debido a la gran dependencia de Pau, de Cocentaina, pero en la prestación recibida el pasado viernes, correspondiendo aún al mes de noviembre, la cantidad apenas pasó de los 300 euros.

"Hace unos meses, sufrimos un recorte del 15% por parte de la Generalitat, y ahora uno nuevo. El viernes recibimos 312 euros", explicó ayer Hipòlit Agulló, quien además recordó que ahora los cuidadores deben costearse la cotización a la Seguridad Social: "En nuestro caso, gastamos unos 40 euros mensuales en medicamentos, debido al nuevo copago, unos 100 en psicólogos para el niño y otros 120 en fisioterapia. Van a por nosotros de manera sibilina, parece que buscan que los dependientes se mueran. Y además, no nos informaron de la cantidad mensual que íbamos a recibir con el nuevo ajuste".

No menos grave es el caso de otra dependiente de Alcoy, que prefiere no revelar su identidad. Ya jubilada, el viernes recibió en su cuenta una cantidad de 20 euros. "En mes anterior me ingresaron unos 300 euros, y de repente me encuentro con este recorte. Con este dinero me resulta imposible costearme a las personas que me ayudan en mi día a día, ya que yo, con mi 84% de discapacidad, no puedo valerme por mí misma. Necesito ayuda. Voy a exigir una explicación a la Conselleria", aseguró ayer.