El primer domingo en el que estaba autorizada la apertura comercial, así como en los festivos de todo el año en el centro de Alicante tras ser declarada esta área como zona de gran afluencia turística (ZGAT), contó con poca afluencia de gente y con menos tiendas abiertas. La denominada milla de oro alicantina no registró un gran volumen de usuarios pese a estar todavía en periodo de rebajas.