El interventor del Estado que ha peritado para la juez las ayudas a la Fundación Cyes -que no tiene relación con la constructora del mismo nombre- desmontó ayer la tesis que defendió el exconseller de Solidaridad imputado en el caso, Rafael Blasco, cuando estalló el escándalo de la compra de inmuebles en Valencia con dinero de Cooperación en 2010. Blasco reconoció en su día que la ONG había adquirido los pisos, pero aseguró que lo había hecho con su propio dinero. Para ello aportó facturas de todo tipo que justificaban que los 1,6 millones de la subvención se habían invertido en pozos y comida en Nicaragüa. Ayer, el interventor Joaquín Falomir se ratificó en su informe y aseguró que la Fundación Cyes "no pudo financiar las facturas de los inmuebles adquiridos".

El interventor, que empezó a declarar a las 9.30 horas y acabó a las 14, explicó que los ingresos de la Fundación Cyes, "por su volumen y destino, así como por la inexistencia de préstamos, no han podido financiar la adquisición de los inmuebles por sus medios propios". "Esto ratifica que dichos inmuebles, con todos los costes colaterales justificados inicialmente, se adquirieron con los fondos provenientes de las subvenciones públicas", apunta el informe, contrarrestando toda la argumentación de Blasco empleada en su día.

Pero la Fundación Cyes no sólo no podía asumir la compra de pisos con el dinero que ingresaba de fondos privados, sino que además, el perito revela que la ONG "carece de capacidad económica para cofinanciar el 20 % de los proyectos concedidos por la Generalitat". El interrogatorio del fiscal fue muy extenso y detallado, puesto que iba preguntando al perito, párrafo a párrafo, si se ratificaba en lo que había descrito en su informe, de 220 páginas y que ha venido desvelando este diario en la última semana. El perito asumió cada uno de los puntos del escrito, en el que se describen diferentes irregularidades en los cinco proyectos adjudicados a la Fundación Cyes, que sumaban 2,2 millones de euros.

El interventor también se ratificó en sus conclusiones en las que advertía gastos de la ONG sospechosos. "El volumen de gastos de viajes, hoteles y restaurantes presenta una importancia significativa en relación con su volumen ordinario de ingresos. Dichos gastos, por su volumen, destino y fecha, no presentan ninguna relación con el teórico destino fundacional".

Según Falomir Gozalbo, "el volumen de gasto a través de caja de la Fundación Cyes, inicialmente alto cuando se perciben las subvenciones, disminuye de modo significativo posteriormente". El perito asegura que "los ingresos por donativos, cuotas de socios, etc., son inexistentes" y todo se fía a las subvenciones públicas, la inmensa mayoría de la Conselleria de Solidaridad cuando estaba dirigida por Rafael Blasco.

Además, el perito también detectó irregularidades en los pagos, en cuanto a que se abonaron subvenciones a esta entidad antes de que se rehicieran algunos de los proyectos presentados, y eso pese a estar prohibido.