La Generalitat ha suspendido, por la crisis económica, las ayudas para las actividades culturales y artísticas organizadas con motivo de las fiestas populares y tradicionales de la Comunidad, una partida que para este año rondaba los 148.000 euros, según la explicación que da la propia consellera Lola Johnson en la orden publicada ayer en el Diario Oficial de la Generalitat. Según esta disposición, la actual situación "ha dado lugar a un importante incremento del déficit público que ha obligado a adoptar medidas drásticas y urgentes para contenerlo y reducirlo, lo que determina que resulte inviable asumir los compromisos de gasto previstos en esta convocatoria".

El Diario Oficial de Generalitat señala también que para el otorgamiento de una subvención debe cumplirse, entre otros requisitos, el de la existencia de crédito "adecuado y suficiente" para atender las obligaciones de contenido económico derivadas de la misma, que no se cumple ahora mismo.

La Conselleria de Turismo aprobó en abril la orden de convocatoria de estas ayudas, ahora suspendida, con el objetivo de fomentar y apoyar actividades culturales y artísticas vinculadas a la cultura popular y tradicional del pueblo valenciano con un importe máximo de 170.000 euros, cantidad que se revisó en julio, reduciéndose a 147.862 euros.

La Federación de Hogueras y otras entidades de las fiestas del fuego alicantinas, la Junta Central Fallera, las entidades de Moros y Cristianos de toda la Comunidad y las Gaiates de Castellón son algunas de las perjudicadas por la anulación de estas ayudas.

En el último ejercicio, el Consell destinó bajo el epígrafe de estas subvenciones culturales un total de 34.541 euros a los quince proyectos presentados desde entidades festeras de la ciudad de Alicante, mientras que en toda la provincia los proyectos fueron 33 y recibieron 46.352 euros de subvención, según fuentes de la Conselleria de Turismo, que anunciaron su voluntad de volver a convocar estas ayudas en 2013 por un montante de 100.000 euros.

Ahora que se ha suspendido la orden para 2012, se deja sin efecto la convocatoria de ayudas y los actos administrativos derivados de la aplicación de la orden, por lo que se procederá al "archivo sin más trámite" de las solicitudes presentadas "por haber quedado sin objeto su pretensión".