Desde probar un nuevo medicamento a buscar nuevas vías de investigación con células madre o tratamientos contra el cáncer. La provincia de Alicante es prolífica en investigación, con cerca de 800 proyectos en marcha que profundizan en todo tipo de disciplinas y que en los últimos años han arrojado resultados esperanzadores a nivel internacional en el conocimiento de enfermedades como la esclerosis, el alzheimer o el parkinson.
El sector ha resistido hasta el momento los envites de la crisis, pero a partir de este año pocos dudan de que muchos de estos proyectos pueden caer por la falta de dinero, especialmente por los recortes en la financiación pública.
"Hasta ahora nos hemos mantenido gracias en parte a recursos propios y a que los proyectos se financian a largo plazo, pero las subvenciones públicas son cada vez menores y la tendencia es a captar fondos europeos, donde los ajustes en investigación no han sido tan bruscos", señala Juan Lerma, director del Instituto de Neurociencias. Sin embargo, añade Lerma, "habrá investigadores que no sean capaces de conseguir estas ayudas y tendrán que abandonar sus proyectos. Habrá grupos de investigación que no subsistan". Este centro mixto de la Universidad Miguel Hernández y el Centro Superior de Investigaciones Científicas abrió sus puertas en el año 2000 y, actualmente, cuenta con más de 40 proyectos en marcha que buscan mejorar la comprensión del cerebro, aunque en los últimos años también se han abierto líneas de investigación relacionadas con el cáncer. Los contratos serán los primeros en verse resentidos con estos ajustes presupuestarios. "Las convocatorias de recursos humanos se han reducido, por lo que a partir de ahora el instituto estará más limitado para contratar personal". Todo pese a que el centro "ha sido hasta el momento generador de empleo, ya que por cada investigador en plantilla hay cinco personas contratadas". En total, trabajan en el Instituto de Neurociencias, ubicado en el campus de Sant Joan de la UMH, cerca de 300 personas.
De apretarse el cinturón también empiezan a saber los investigadores de la Universidad de Alicante. "El importe de las ayudas está bajando, así como la cantidad de años a los que se financian los programas y el personal contratado", señala Amparo Navarro, vicerrectora de Investigación.Las ayudas para personal investigador "han caído en el último año un 20%". Actualmente, la Universidad tiene en marcha 482 proyectos de investigación financiados por diferentes entidades, muchos de ellos por empresas "que atraviesan por un mal momento y es más difícil que apuesten por el I+D+I". En este sentido, "aunque en 2012 hemos logrado mantener el mismo número de proyectos financiados por el sector privado, los ingresos correspondientes a los mismos han descendido y ya veremos qué ocurrirá en 2013".
Respecto al anunciado recorte en investigación dentro de los presupuestos generales del próximo año, Navarro afirma que "nos afectará, aunque todavía no sabemos en qué medida, si financiando menos proyectos con más cantidades de dinero o manteniendo las mismas líneas de investigación, pero las ayudas europeas también se perfilan como la esperanza para que la investigación en la universidad mantenga el tipo".
La vicerrectora recuerda que el liderazgo de la investigación "está en las universidades, en el sentido de que todo el personal docente se dedica a ella". Esto hace "que la financiación sea muy variable dependiendo de los proyectos, porque no todas las ramas son igual de caras". Es más costoso "poner en marcha un proyecto biomédico que otro en ciencias sociales o humanidades".
Aunque más desconocida, la investigación de la provincia también tiene un pilar importante en los hospitales. Los centros sanitarios de Alicante trabajan en cerca de 120 ensayos clínicos en macha en estos momentos. La mayoría de ellos "están financiados por los laboratorios farmacéuticos, por lo que no sabemos muy bien qué ocurrirá el año que viene, ya que la industria farmacéutica ha sufrido importantes recortes en sus presupuestos", afrima Domingo Orozco, gerente de la Fundación para la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana, Fisabio. Además de los ensayos clínicos, los hospitales de la Comunidad tienen en marcha 45 proyectos de investigación financiados a través de becas de organismos públicos. Orozco recuerda la importancia de estas investigaciones que se realizan en los hospitales. "Son fundamentales para el desarrollo de nuevos fármacos, para ver los efectos adversos de medicamentos, estudiar nuevas indicaciones y mejorar la calidad de vida del paciente". Fisabio comenzó a rodar el año pasado "y engloba al 80% de la red sanitaria de la Comunidad con 93 personas investigando". La entidad ha integrado a otras fundaciones existentes, "por lo que ahora tenemos más capacidad de investigación y de competencia para captar más fondos".
