A partir del mes que viene la Conselleria de Educación pone en marcha un nuevo sistema telemático para la sustitución de profesores de baja por enfermedad o que se jubilan, pero el programa, que arranca en fase de pruebas el día 29 de octubre, no acelera un ápice la lentitud actual de los trámites para cubrir estas plazas.
Los delegados sindicales echaron ayer en cara a los responsables educativos que no aprovechen para incorporar métodos más ágiles, con motivo del estreno del programa para la petición de plazas para sustituciones. Desde Educación renuncian a buscar mejoras en este sentido. Se limitaron a subrayar ante los representantes docentes que "Hacienda no inicia el proceso de creación de una vacante hasta que la persona anterior ha abandonado efectivamente la plaza -por ejemplo en el caso de las jubilaciones-. Esto "prolonga innecesariamente la necesidad del docente para los alumnos, pese a saberse con una antelación de hasta tres meses el día que se jubila", como destaca Ferran García, de CC OO.
"La descripción de un mal procedimiento no lo justifica. Creemos que la Administración es negligente en justificarse con un mal concepto de burocracia lenta que no atiende las necesidades del sistema educativo con la antelación que podría hacerlo", añaden desde el sindicato.
Entre los datos aportados ayer por la conselleria, que insistió en que se cumple exquisitamente la ley para cubrir las bajas a los diez días de producirse, figura una media de 1.100 docentes de baja cada mes. De estas faltas, al menos un tercio responden a enfermedades que superan los diez días de baja, de forma que "se condena a miles de alumnos a permanecer sin profesor a lo largo del curso", lamenta García. Beatriu Cardona, por parte del STEPV, subraya que el nuevo programa permitirá al interino conocer el listado de vacantes "pero no se cubrirán antes".
Marcha atrás para los datos médicos privados
Donde dije digo, digo Diego. Educación ha decidido rectificar respecto a la exigencia de la historia clínica informatizada a los nuevos interinos que contrata desde septiembre. La denuncia del sindicato de enseñanza STEPV, por entender que el documento contempla datos privados de la salud, llevó ayer a los responsables educativos a comprometerse en emitir un comunicado en la web y aceptar el "apto" médico para el ejercicio docente, como sucedía hasta ahora con el certificado médico. "La historia clínica no tendrá necesidad de incorporar todos los datos", señalaron desde la conselleria. El nuevo documento se pedía para ahorrar burocracia en las consultas médicas. V. B.
