Empezaron los recortes y trajeron consigo las protestas. Carteles colgando de ventanas y verjas de colegios e institutos, camisetas con lemas, pegatinas con tijeras. Todo eso puede desaparecer de la vista de cualquier viandante que pase por delante de un centro educativo si, como parece ser, el cuerpo de inspección escolar se pone rígido en cuanto al cumplimiento de la normativa existente. En concreto, si continua exigiendo la ejecución de la Instrucción 1/2010 sobre el uso de sus tablones de anuncios y espacios públicos, así como de la megafonía, norma que impide la colocación de cualquiera de estos elementos fuera de su "espacio habilitado" o el uso del altavoz para cualquier fin que no sea la mera descripción de las actividades del centro.
Educación, a través de su Subsecretaría, envió el pasado día 21 de septiembre una nota informativa recordando a la inspección educativa que debe exigir en los centros escolares, concretamente a sus directores, el cumplimiento de esta instrucción. Dicha directriz surgió a raíz del expediente y sanción al director del IES "Las Norias" de Monforte del Cid, hace ahora dos años, por permitir que se colocara la imagen del exconseller de Educación Alejandro Font de Mora boca abajo.
"Está habiendo un exceso de celo por parte de los inspectores educativos por hacer cumplir esta norma", explicaron a fuentes de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de la UGT (FETE-UGT), que ha denunciado los hechos. Según las mismas, en lo que va de mes ya se han contado distintos casos en la provincia de Castelló en los que los directores se han visto "amenazados" por permitir carteles y murales reivindicativos.
Avisos por llevar camisetas
Varios de los directores denunciaron este "abuso" de los inspectores, que según el sindicato, "reprimen y censuran las protestas legítimas" de los estudiantes y profesores. "La conselleria utiliza a la inspección para coartar su libertad de expresión", criticaron desde UGT-FETE.
El afán por esconder de todo ojo ajeno y propio estas manifestaciones de disconformidad ha llevado en algunos casos a exigir la retirada de carteles y murales bien visibles. También se ha apercibido verbalmente a profesores que llevaban puestas camisetas negras o verdes donde se leía: "Per una escola pública i de qualitat".
Los equipos directivos denuncian asimismo que están siendo advertidos, "bajo amenaza de apertura de expediente", para que retiren o impidan que se coloquen estos carteles. Algunos de éstos no son más que folios colgados en las entradas de los colegios donde se informa de los gastos de funcionamiento del centro o de las becas de comedor, libros y transporte que "se adeudan" por parte de la Generalitat. En otros, se muestra la reducción de profesorado que ha sufrido el colegio o simplemente anuncia la siguiente convocatoria de protesta contra los recortes.
Con todo, la nota que envió hace un mes la subsecretaría rezaba: "se recuerda la responsabilidad de los directores de los centros docentes públicos de cumplir y hacer cumplir lo contenido" en la Instrucción 1/2010. Ésta no deja lugar a dudas: "en caso de colocarse (carteles, murales) fuera del ámbito de los tablones de anuncios se procederá a su inmediata retirada y a la advertencia a la entidad o persona firmante de los mismos". Respecto a la utilización de la megafonía de los centros, se establece que "deberán respetar los principios de neutralidad, objetividad e imparcialidad, al margen de cualquier otro factor que exprese posiciones personales, familiares, corporativas, clientelares o cualesquiera otras que pudieran colisionar con este principio".
El caso del IES de Monforte del Cid terminó con una sanción por parte de la Conselleria de Educación de 20 días de inhabilitación al director del instituto.
Recorrido por los barrios que crecen sin nuevos centros
La primera Ruta del Desmantelamiento de la Educación Pública supuso ayer el colofón a una semana plagada de protestas. Los asistentes visitaron en el autobús tres barrios en expansión -Orriols con la avenida Alfahuir, la nueva zona de Campanar y el entorno de la avenida Francia- para evidenciar "20 años de una política que no ha previsto colegios públicos en barriadas que van creciendo, mientras favorece los intereses mercantiles y confesionales privados en solares que deberían ser para la escuela pública". Además, reivindicaron que esta "planificación desastrosa" ha supuesto la degradación de la educación en dos líneas: La escuela pública "que es asistencial" y la concertada-privada "que es para la elite", afirmaron, lo que genera "una descompensación de la red pública y la privada provocando dos realidades educativas que marcan los guetos". El autobús se detuvo también ante la Escuela Oficial de Idiomas (que está saturada y con el nuevo centro previsto, descartado) y en el solar donde se debe construir el nuevo colegio 103 que está formado íntegramente por barracones. m. ros
