­Ya lo advirtió el presidente de la Audiencia Provincial, Vicente Magro, a finales del pasado año. «Debemos impulsar programas de reeducación y prevención para jóvenes», decía. Hablaba con conocimiento de causa. En 2011, los tribunales alicantinos juzgaron ni más ni menos que a 425 menores por agredir a sus padres, y a 25 por pegar a sus parejas. La cifra, histórica en la provincia, encumbra a Alicante a la cúspide nacional en número de casos de violencia doméstica y de género con un menor como agresor. Solo Valencia, con 650 episodios violentos en el hogar, y la Comunidad de Madrid, con 512, superan los guarismos alicantinos. Los datos de la Fiscalía General del Estado así lo constatan. Su Memoria 2012, publicada recientemente y con los datos pormenorizados de un año antes, saca a la luz el progresivo aumento de procesos que se han venido contabilizando en tierras alicantinas. Solo de 2010 a 2011 -últimos datos disponibles-, el incremento es del 16,2%. Concretamente, se ha pasado de 387 a 450. Todo un récord.

Fuentes judiciales admitieron ayer que cada vez se juzgan episodios más violentos, principalmente en familias desestructuradas y que están pasando por problemas económicos. Ese es el modelo tipo de los casos que llegan a los juzgados. Pero hay más. Muchos más. Solo así se explica la diferencia abismal entre los datos de la provincia y los de otras demarcaciones españolas. Y es que Alicante contabilizó en 2011 más procesos que varias comunidades autónomas completas. Véase, por ejemplo, País Vasco (178), Castilla y León (188), Baleares (268), Galicia (311), la Región de Murcia (319) o Cataluña (342), entre otras.

Ese apartado no es el único preocupante que recoge la Memoria anual de la Fiscalía. Otro especialmente llamativo es el de las agresiones sexuales de jóvenes de hasta 18 años. A lo largo de 2011 se produjeron 75 casos entre agresiones y abusos. O lo que es lo mismo, los tribunales alicantinos juzgaron a una media de un menor cada cinco días por estos delitos. La cifra es idéntica a la de Valencia, mientras que en Castellón se registraron 20 casos. Una vez más, la provincia figura en los puestos delanteros del país.

Tal y como se recoge en la tabla anexa, los menores que residen en Alicante cometieron multitud de delitos el pasado año. Tuvieron que acudir a los juzgados por lesiones (1.232 casos), robos con fuerza (593), hurtos (464) y daños (358). Además, las fuerzas de seguridad sorprendieron a 62 jóvenes conduciendo sin carné -ya sea de ciclomotor, motocicleta o coche-, 35 iban al volante de forma temeraria y 3 conducían bajo los efectos del alcohol o las drogas.