­El carril-bici da para muchas opiniones. No descubrimos nada si anunciamos que en muchas zonas de paseo existe un conflicto entre viandantes y ciclistas. Es el caso, por ejemplo, de las dos playas más frecuentadas de Alicante: el Postiguet y San Juan. Pero la situación está cambiando, por lo menos en una de ellas.

Los bañistas que se acercan a la playa o simplemente gente que acude al paseo marítimo para caminar se encuentra en ocasiones con el peligro de las bicicletas que pasan velozmente por donde no deben. Esto supone un peligro para todos, pero mucho más para los ancianos y los niños pequeños.

Desde el verano pasado, la normativa municipal prohíbe circular con las bicis, o cualquier otro vehículo, por las zonas destinadas exclusivamente a los peatones, lo que incluye los paseos marítimos de los arenales. Esta normativa supone un problema en las playas que no disponen de carril-bici. Este es el caso del Postiguet. Allí los usuarios de bicicletas se ven obligados a tomar la carretera u optar por una solución más arriesgada: saltarse la norma.

Laura Conca tiene un quiosco en el Postiguet. Ella, que pasa varias horas al día en su puesto, cuenta que ha visto "varios accidentes entre ciclistas y peatones. El más reciente fue la semana pasada, cuando un cicloturista embistió a un niño pequeño", explica. Conca cree que los policías deberían ser más duros. La Policía Local intenta siempre evitar denunciar al infractor (acarrearía una multa de 80 euros) y simplemente le advierten y vigilan para que no vuelva a cometer la falta. En un año, solo se ha registrado una sanción.

"Al comienzo del paseo hay señales que advierten de la prohibición de utilizar la bicicleta, pero aun así la gente entra al paseo con la bici y cuando nos ven se bajan de ella y continúan a pie portándola a su lado", explica un policía que hace su turno en la Playa del Postiguet.

Fernando Torrico, jubilado, es uno de los ciclistas que se saltan la norma. Él ve necesario que el Ayuntamiento se encargue de habilitar un carril-bici, por lo menos desde el Tram a la playa. "Estaría bien que hiciesen un trocito de carril-bici, por lo menos para poder desplazarme hasta la playa más fácilmente. Además, ayudaría a que la gente hiciera más deporte, que es muy bueno", dice.

Sara Poyatos, estudiante y vecina de Alicante, está pasando el verano en la playa y se queja de que "a veces pasan por aquí las bicis haciendo caballitos, sin respetar a nadie".

La opinión de la quiosquera y la estudiante contrasta con los que dicen los socorristas Andrés del Pozo y Dzvinka Fedorak. "Para la cantidad de bicis que pasan, este verano apenas han existido accidentes entre ciclistas y peatones", aseveran.

Solución

En la Playa de San Juan las condiciones eran parecidas hasta hace dos meses, cuando se abrieron nuevos tramos de carril-bici que abarcan una extensión de 1,8 kilómetros al borde de la playa. ¿Qué efecto habrá tenido esta construcción? ¿Soluciona el problema o, por el contrario, los ciclistas siguen sin utilizarlo?

Isabel Chevallerau vive en San Juan y es profesora. Ella, que utiliza la ciclovía habitualmente, piensa que el carril-bici es todavía corto, pero cree que éste es "el camino a seguir" y que es "bueno para todos. Aún se nos queda escaso, pero ahora al menos puedo bajarme con los niños y dar unas pedaladas cerca de la playa", dice la cicloturista.

Nadal Linares, empresario, lleva todo el verano bajando al arenal y asegura que el problema con los ciclistas "ya no existe". Otra persona que conoce bien la situación de la playa es Gloria Pastor, gerente del Restaurante Niza. Ella asegura que el problema con los ciclistas "está solucionado", aunque "la presencia policial es el primer causante. Cuando llegue el 15 de septiembre y la playa esté de nuevo desierta de bañistas y policías, los ciclistas utilizarán otra vez el paseo y el carril-bici quedará para los caracoles".