Iba a ser uno de los macrocentros comerciales más destacados de la ciudad, con grandes superficies, numerosas zonas de ocio, hotel, oficinas y un gran parking, pero al final se va a quedar en unos bajos comerciales dentro de una urbanización de 144 viviendas.
La crisis económica ha provocado un hecho tan insólito que prácticamente no tiene antecedentes en la ciudad. Una promotora ha renunciado a la construcción de un gran centro comercial en terrenos del Pau 2 junto a la Gran Vía y tras solicitar el cambio de uso de los terrenos los va a destinar a la construcción de viviendas.
Lucentum Ocio justifica su decisión reconociendo que no ha conseguid0 la comercialización de su proyecto "dada la sobreoferta de suelo terciario existente en la zona". En su lugar se decanta por el cambio de uso del suelo para edificar 144 viviendas en bloques de diez alturas y reduce la actividad comercial a la meramente testimonial ya que en lugar del macrocentro sólo habrá unas tiendas en los bajos de los inmuebles.
La parcela que cambia de uso y que acogerá viviendas en lugar del centro comercial linda con la avenida del Doctor Jiménez Díaz y la calle deportista Isabel Fernández, por lo que los edificios darán fachada a este tramo de la Gran Vía.
La historia de este fracasado proyecto se remonta a hace prácticamente 20 años, cuando se aprobó el Pau 2. Lucentum Ocio presentó su propuesta y el Ayuntamiento la aprobó el 3 de diciembre de 2002, pero el macrocentro comercial de 38.000 metros cuadrados permaneció bloqueado durante un lustro, lo que obligó a la promotora a modificarlo y volver a tramitarlo. Esta segunda versión del proyecto obtuvo la luz verde municipal el 9 de mayo de 2008 pero tampoco se materializó, en esta ocasión porque otro proyecto le había ganado la iniciativa, concretamente el centro comercial de Isla de Corfú, promovido por Enrique Ortiz, y en la misma avenida de Jiménez Díaz, unos metros más abajo, en suelo del Pau 1. Este centro cuenta con tiendas de Supercor, Mercadona, Worten, Kiabi y Juguetilandia, entre otros.
Si a esta gran oferta comercial en las proximidades unimos la grave crisis económica que ha paralizado la construcción de viviendas y ha frustrado el importante crecimiento poblacional previsto en este área de la ciudad, se entenderá que la promotora haya tirado la toalla y opte ahora por un proyecto residencial con la esperanza de que pueda salir adelante.
Bajos comerciales, pisos, jardín y cesión de parcela dotacional
El proyecto que va a llevar a cabo Lucentum Ocio, que ha precisado de una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana, consistente en conservar la edificabilidad de la parcela, que es de 26.850 metros cuadrados de techo, pero cambiando el uso de 15.030 metros, que pasan de ser comercial a residencial, manteniendo el resto de metros como uso comercial para los bajos de los cuatro inmuebles previstos. También habrá una zona verde de 3.496 metros.
Además, en cumplimiento de la exigencia municipal, la promotora ha remitido ahora un escrito al Ayuntamiento en el que solicita que acepte la cesión, libre de cargas, de una parcela de estos terrenos que está calificada como de uso dotacional público. Tiene una superficie de 5.261 metros cuadrados, de los que 3.497 metros cuadrados se destinarán para zonas verdes y los 1.764 metros restantes para equipamiento público. M. D.
