Todos los centros de salud de la provincia de Alicante empezarán este próximo lunes a aplicar los menús únicos. En la Comunitat Valenciana, los hospitales también retiran el vaso de leche o de zumo por las noches. Los menús serán de periodicidad semanal, excepto para los pacientes crónicos (que repetirán cada 2 semanas). La Administración asegura que con esta medida se reduce el gasto 7,5 millones de euros.
Concentrar servicios para ahorrar. Ésta es una de las máximas que se ha impuesto la Conselleria de Sanidad para apretarse el cinturón en estos tiempos de crisis. En este contexto, la mayoría de los hospitales públicos de la provincia se quedarán sin el servicio de cocina. La idea es que las comidas o cenas para los miles de pacientes que a diario están ingresados en los centros sanitarios sea preparada en tan solo dos hospitales y se distribuya al resto. La Conselleria ya tiene perfilados los pormenores de esta medida. Según explicaba hace casi un mes el conseller de Sanidad, Luis Rosado, «este año van a salir a concurso diferentes lotes de cocinas». En la provincia habrá dos. El primero «agrupará al Hospital General de Alicante, al de Sant Joan y al de San Vicente» y el segundo «a Elda, Elche y Orihuela». El Hospital de La Vila entrará en un lote con otros centros de la provincia de Valencia. Posteriormente «saldrán a concurso otros lotes con los hospitales que quedan pendientes».
La idea, explicaba el conseller de Sanidad, «es que un hospital cocine y distribuya los menús a otros dos o tres centros, lo que abarata el coste del contrato». También se quiere unificar los criterios en la preparación de los alimentos para que su elaboración sea más económica. Según el planteamiento de la Conselleria de Sanidad, en el primero de los lotes, un solo hospital preparará los menús para 1.400 enfermos y en el segundo, un hospital será el encargado de cocinar para 1.366 personas cada día.
Evitar la diversificación
Esta medida de centralización de las cocinas se une a la planteada de un menú único para todos los pacientes de los hospitales. Con ambas medidas la Conselleria de Sanidad persigue ahorrar 7,5 millones de euros.
«Queremos evitar la diversificación de menús que actualmente hay en los hospitales, donde hay centros que dan a elegir entre dos o tres primeros y segundos», explica Luis Rosado. La idea «es que haya un menú único y a partir de ahí los menús específicos para los enfermos de determinadas patologías. En este sentido, «actualmente, el 55% de los menús que se reparten en los hospitales son dietas específicas; La idea es que éstas no se toquen y se varíe el 45% restante».
La Conselleria de Sanidad apuesta por las denominadas «economías de escala» para ahorrar en el presupuesto del departamento. A principios de año, ya se hizo una prueba del ahorro que supone comprar conjuntamente para todos los departamentos sanitarios. Entonces, Sanidad recurrió a una subasta electrónica para adquirir la ropa de todos los pacientes que son hospitalizados en la Comunidad. La Conselleria marcó un precio de salida y las empresas fueron haciendo ofertas a la baja. «Finalmente se consiguió un ahorro de 933.465 euros respecto al precio de licitación», afirma Luis Rosado. Sanidad también quiere centralizar el servicio de lavanderías de los hospitales
Sanidad elimina en los hospitales los yogures y zumos nocturnos y restringe el agua a los pacientes
Los hospitales eliminarán los zumos, yogures o vasos de leche que se dan a los enfermos por las noches antes de dormir. También se racionarán las botellas de agua a dos por enfermo ingresado con las comidas y las cenas.
Normalmente, a los pacientes ingresados en los hospitales se les ofrece por las noches la posibilidad de tomar un zumo, un yogur o un vaso de leche, un extra que desaparecerá. Únicamente se harán excepciones en aquellos casos en los que el médico indique que el paciente se tiene que tomar medicación por la noche acompañada de algún tipo de alimento. Tampoco se racionarán las botellas de agua a aquellos enfermos que por prescripción médica deban consumir mucha cantidad de líquido.
El sindicato UGT en el centro hospitalario critica firmemente esta medida, ya que «supone eliminar un complemento alimentario a personas que están enfermas». Recuerdan además que la cena se sirve entre las 19.30 y las 20 horas, por lo que a partir de ahora «no se servirá nada a los pacientes hasta doce horas más tarde».
De la misma manera, UGT sostiene que con estas nuevas medidas de ahorro «sólo se va a administrar medio litro de agua a los enfermos por día, cuando está indicado por los propios médicos que se consuman dos litros de agua al día». Estas primeras medidas de ahorro, alerta el sindicato, «no son más que la antesala de lo que nos espera» y alerta de que «pueden repercutir en la salud» de los pacientes. «¿A caso también se llevará a cabo un recorte en el valor nutricional de las comidas que se sirvan?», se pregunta UGT.
Fin del menú a la carta
Paralelamente a la desaparición de estos suplementos alimentarios se implantará en el Hospital General de Alicante el menú único con una rotación de carácter semanal. La Conselleria de Sanidad ya anunció a principios de año que pondría fin a los menús a la carta en los centros sanitarios.
Hasta ahora, los pacientes que no requieren de una dieta especial, pueden escoger entre varios primeros y varios segundos. A partir de los próximos días, se servirá el mismo menú básico a todos los pacientes, aunque se respetarán las dietas específicas de las patologías que lo requieran (bajas en sal, para diabéticos...). Quien quiera optar a platos diferentes, tendrá que abonar la diferencia. La Conselleria de Sanidad justifica esta medida en que actualmente «el 55% de los menús que se sirven en los hospitales de la Comunidad son de dietas específicas».
