No habrá elecciones anticipadas. "Porque no hay necesidad, porque no es lo que quieren los ciudadanos de la Comunidad Valenciana, y porque supondría realizar un gasto de más de 10 millones de euros". En estos términos se pronunció ayer ante el pleno de las Cortes el presidente del Consell, Alberto Fabra, a las preguntas de la oposición sobre si contemplaba convocar elecciones anticipadas por el "incumplimiento" de su programa electoral y los recortes aprobados por su gobierno, "en un acto de sumisión a Rajoy". Fabra fue rotundo al aseverar que no convocará elecciones anticipadas. Con independencia del escenario que dibujaría la no validación por parte del Gobierno central de su plan de reequilibrio y, por ende, de la intervención del a Comunidad.

Ante las críticas de la oposición, Fabra insistió en que los recortes no han recortado "ningún derecho" a los ciudadanos y "no privatizan ni la educación ni la sanidad". "La educación seguirá siendo gratuita, universal y pública y los ciudadanos de la Comunidad continuarán atendidos por los mismos médicos", garantizó Fabra, que reivindicó el firme compromiso de la Generalitat para cumplir con el objetivo de déficit. "Claro que se va a cumplir con el déficit; porque ahí está en juego la credibilidad de la Comunidad Valenciana y del Estado; o tenemos las cuentas ajustadas o no podremos acceder a ningún tipo de inversión extranjera ni a la posibilidad de crédito", afirmó el presidente del Consell, que defendió que "ya no se puede ir por libre y todos tenemos que cumplir para no exceder el nivel de déficit que Europa exige a España".

Fabra aseguró que en el Consejo de Política Fiscal y Financiera del 17 de mayo, la Comunidad Valenciana va a "dar la cara" y va a "hacer creíble" el plan de reequilibrio financiero presentado, con el que cumplirá el objetivo del déficit. Así, afirmó que defenderá que el plan de reequilibrio "pueda ser realidad" y generar la confianza necesaria para garantizar "prosperidad, dinamismo económico y también préstamo a las familias y a las empresas", y que seguirá pidiendo una financiación justa y adecuada. En este sentido, reconoció que la Comunidad ha estado "infrafinanciada en los últimos años" y eso ha sido lo que ha hecho que "durante casi 30 años hayamos tenido menos financiación que otras comunidades autónomas".

El portavoz socialista, Antonio Torres, apuntó que desde que Fabra accedió a la presidencia hay 90.000 parados valencianos más, y que la tasa de paro del 27,3%,es "la más alta de la historia" de la Comunidad y tres puntos superior a la media española. Desde EU, Enric Morera, pidió a Fabra que se plante ante Rajoy, pues si "condena" a la Comunidadal 1,5% de déficit los recortes serán "más intensos". Y la portavoz de EU, Marga Sanz, calificó de "estafa democrática" la decisión del PP de aplicar un programa electoral "oculto".

Hacienda revisa la previsión de ingresos en el plan del Consell

La evolución de los ingresos de la Generalitat -incluida la previsión de obtener este año 141 millones por la venta de patrimonio- fijada por el Consell en su Plan de Reequilibrio no convence al Ministerio de Hacienda, que le ha pedido aclaraciones y papeles para justificar estos números y, de hecho, podría obligar a revisar las cifras y exigir medidas adicionales. Según pudo saber este periódico, Hacienda mantiene discrepancias con bastantes comunidades, entre ellas la valenciana, sobre todo con las expectativas de ingresos reflejadas en el documento que, de no obtener el visto bueno en el Consejo de Política Fiscal y Financiera del próximo jueves, comportaría la intervención de la Generalitat por Madrid.

El ministerio negocia estos días con el Consell un plan que, más que nunca, se está mirando con lupa, ya que la credibilidad de España ante la UE está en juego. En el caso de la Comunidad, el objetivo del déficit fijado en el 1,5% comporta un recorte del gasto respecto a 2011 de 2.260 millones, una cifra astronómica que el Consell fía a las medidas sobre los ingresos para lograr 1.036 millones adicionales, mientras los otros 1.223 millones son recortes en el gasto. Hacienda teme que el Consell haya tenido la tentación de hinchar los ingresos para cuadrar su plan, y advierte que todos han de ajustar las transferencias del Gobierno al nuevo escenario fijado por los presupuestos estatales. Por eso están en revisión promesas como los 141 millones por la venta de inmuebles y solares. Y eso que el Consell presupuestó 400. En el plan de reequilibrio hay consignados aspectos como 285 millones en concepto de "aumento de ingresos corrientes respecto a la liquidación de 2011 derivados del modelo de financiación", o el canon de 180 millones por la privatización de la gestión de la sanidad que se pondrá en marcha en 2013. Las modificaciones podrían exigir medidas adicionales y hay quien no descarta adelantar las subidas de impuestos.