100.000 personas según los sindicatos y 40.000 según la Policía son las primeras cifras que se barajan al inicio de la manifestación en Alicante por la huelga general. Finalmente, la ubicación de salida se ha cambiado de la Estación de Renfe a la puerta de la Diputación Provincial ya que la cantidad de gente que había dificultaba que se hiciera desde el primer emplazamiento la salida. Teniendo en cuenta los datos de sindicatos y Policía, podría tratarse de la protesta más numerosa que vive la ciudad contra la reforma laboral. Una hora y cuarto después de la hora de inicio de la marcha, salían los últimos participantes, con la avenida de la Estación, la Rambla y Alfonso el Sabio abarrotadas.

La marcha ha discurrido sin incidencias tras la pancarta "Volen acabar amb tot" y, al término, la líder comarcal de CCOO, Consuelo Navarro, ha rechazado la "destructiva" reforma laboral que "no creará empleo digno ni de calidad ni para los jóvenes sino más precariedad, incertidumbre y desigualdad". Por su parte, el secretario general de UGT en l'Alacantí y Les Marines, Óscar Llopis, ha calificado la huelga general en la provincia de "éxito" y ha criticado que el pequeño comercio no se haya adherido "pese a que sus clientes son los trabajadores y no los grandes empresarios o banqueros".

Entre los manifestantes hay gente de todas las edades y de todos los sectores sociales. Entre ellos, muchos estudiantes, profesores y políticos, entre ellos dos de los socialistas que optan a la secretaria general del partido en el congreso autonómico que empieza mañana en la Universidad de Alicante. Se trata de Joaquim Puig, quien ha marchado junto a la portavoz municipal en Alicante y aún secretaria de Organización del PSPV-PSOE, Elena Martín, y Manuel Mata, mientras que también han estado los diputados autonómicos Lluis Torró y Esther López (EU) y Mireia Mollá (Compromís), entre otros.

Algunos jóvenes han cantado máximas como "Vale la pena luchar como en Atenas", o "Los jóvenes españoles tenemos tres salidas: por tierra, mar y aire?. El recorrido se ha convertido en una marea de color, rojo, verde o blanco, según el sindicato o el partido político, y también ha salido a las calles numerosos ciudadanos anónimos, obreros, parados, padres, abuelos, con mensajes contra los recortes como "Remofa laboral?,"La crisis capitalista, que la paguen los ricos" o "El PP rejuvenece: nos lleva a 1972". El Gobierno no se ha librado de las consignas, entre ellas "Rajoy, escucha, el pueblo está en la lucha", o "Españoles, Franco ha vuelto, pero con barba". También hubo alusiones a Camps y a los trajes en las pancartas. La marcha terminará con los discursos de los convocantes.