Ryanair decidió ayer tirar de guión y ratificó, tras recibir la sentencia del juzgado de Elche que reconoce la competencia de Aena para organizar el tráfico en el aeropuerto, su desprogramación en la terminal, tanto este verano como el próximo invierno. Stephen McNamara, director de comunicación de la aerolínea, no varió ni una coma el discurso de su presidente, Michael O´Leary. Insistió en que la compañía no está dispuesta a aceptar que le cambien las condiciones con las que comenzó a volar en 2007, que "contemplaban las operaciones de embarque y desembarque a pie", y avanzó que debido al recortes de sus vuelos el tráfico aéreo en El Altet caerá un 10% en este primer trimestre del año, lo que, según Ryanair, se traducirá en la pérdida de 200.000 pasajeros.

La compañía irlandesa insiste en que la eliminación de sus vuelos viene forzada por la imposición del uso de las pasarelas (o "fingers"), lo que le impide cumplir con los 25 minutos de tiempo máximo de escala, y le supone un incremento de costes de 2 millones de euros al año.

El magistrado titular del Juzgado de los Mercantil 3 de Alicante, con su sede en Elche, Luis Seller Roca de Togores, dio ayer la razón a Aena en el contencioso judicial que mantenía con Ryanair desde junio de 2011 por el uso de las pasarelas telescópicas en el aeropuerto. La sentencia comunicada a las partes anteayer lunes señala que Aena no ha incurrido en ningún tipo de posición dominante, y es la responsable de la organización del tráfico en la terminal. Contra esta sentencia cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Alicante en un plazo de veinte días.

Ryanair recibió el varapalo judicial justo el día en que inauguró su nueva base en el aeropuerto de Palma de Mallorca, donde ha trasladado gran parte de la infraestructura que había creado en Alicante desde febrero de 2007, cuando comenzó a operar, y que hizo que el verano pasado hasta 11 aviones de la aerolínea irlandesa pernoctaran en El Altet todas las noches y la compañía operara hasta 60 destinos directos desde la provincia. La situación ha cambiado sustancialmente de marzo de 2011 a marzo de 2012. Ryanair ha reducido a la mitad su operaciones en El Altet, lo que se traducirá, según la aerolínea, en una caída de 1,5 millones de pasajeros.

La sentencia hecha pública ayer reitera los fallos anteriores rechazando las medidas cautelares que pedía Ryanair para embarcar todos sus vuelos a pie hasta que hubiera dictamen del juez.

La compañía tiene veinte días para presentar recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Alicante, aunque ayer no anunció esta posibilidad. En síntesis, la sentencia señala que Aena no ha incurrido en ningún tipo de posición dominante al imponer el uso de las pasarelas telescópicas -no para todos los movimientos- debido a que la legislación le da las competencias, prima la seguridad de los pasajeros y, por otro lado, es más operativo. Debido a que dos aviones no pueden ocupar dos posiciones de pasarela junto a la terminal y embarcar y desembarcar ambas a pie a sus pasajeros. El fallo ratifica los argumentos de Aena y le da la razón condenando, además, a Ryanair a pagar las costas.

De nada sirvieron los argumentos de la aerolínea en el sentido de que se le han cambiado de forma unilateral la condiciones con las que comenzó a operar en Alicante, ni los argumentos de su perito en el sentido de que los embarques a pie en El Altet no alteraban la seguridad de los pasajeros, como sostiene Aena y cree en juez. Incluso, en el fallo judicial se recuerda que Aena tiene derecho por ley a cobrar la tasa de pasarela (98 euros por avión) independientemente de que la compañía aérea la utilice. Lo que paga es la posición pegada a la terminal.

El juez también recuerda en su sentencia que "el embarque y desembarque a pie no constituye un nota esencial de la operativa de Ryanair. Esta compañía opera utilizando pasarelas telescópicas en otros aeropuertos incluido el de Palma de Mallorca, al que ha desplazado parte de sus operaciones residenciadas hasta ahora en Alicante". Para el magistrado "no se puede concluir que por este solo hecho se le haya generado una desventaja competitiva". A Ryanair le queda el recurso en la Audiencia Provincial.

Ryanair: "Decepción al no haber prevalecido el sentido común"

El director de comunicación de Ryanair, Stephen McNamara no se cortó al valorar el contenido de la sentencia del juzgado de Elche. "Ryanair está decepcionada porque el sentido común no haya prevalecido y confirmamos que los severos recortes anunciados en nuestra base de Alicante se mantendrán este verano y el próximo invierno tras la desestimación de la demanda interpuesta para anular la estúpida decisión de Aena de obligarnos retrasar sus vuelos y pagar un extra coste de 2 millones de euros por el uso de las pasarelas en la nueva terminal de Alicante".