Internet siempre deja un rastro y en el caso de hechos delictivos tarde o temprano siempre se suele descubre al infractor. Eso es lo que ha pasado con el caso de las amenazas que denunció en agosto del pasado año el concejal socialista Pablo Rosser. La Policía Nacional de Alicante ha detenido a un joven vecino de San Vicente del Raspeig como presunto autor de unas amenazas de muerte a Rosser a través de Facebook, según informaron ayer a este diario fuentes próximas al caso.

La detención se realizó el martes por la tarde en San Vicente del Raspeig y el joven permaneció hasta ayer por la tarde en los calabozos de la Comisaría Provincial, cuando fue puesto en libertad por un problema de salud para que hoy comparezca ante el juez de guardia de San Vicente, quién decidirá si decreta o no libertad provisional. Se desconoce si el detenido ha querido prestar declaración en Comisaría o se ha acogido a su derecho a no hacerlo.

Hasta el momento no han trascendido detalles concretos sobre la operación policial y los motivos para lanzar las amenazas de muerte a Rosser, ya que el caso se encuentra bajo secreto de sumario desde la denuncia presentada por el concejal del grupo municipal socialista. No obstante, lo lógico es que los investigadores de la Policía hayan intervenido el ordenador desde el que supuestamente se enviaron las amenazas de muerte.

El Cuerpo Nacional de Policía sí está realizando indagaciones para comprobar si el joven detenido tiene alguna vinculación con grupos antisistema, según confirmaron fuentes cercanas al caso.

Tras la denuncia presentada en agosto del pasado año, la Policía Nacional comenzó a realizar indagaciones para descubrir el ordenador desde el que se realizaron las amenazas recibidas por Pablo Rosser en su perfil de Facebook. El propio concejal llegó a escribir en su muro que los mensajes recibidos eran unas amenazas "muy desagradables".

Presumiblemente las amenazas al concejal fueron enviadas al apartado de mensajes directos que solo puede leer el usuario de Facebook, aunque también recibió al parecer dos correos electrónicos.

Tras la denuncia presentada en agosto de 2011, el concejal Pablo Rosser solo confirmó los hechos y declinó dar cualquier detalle sobre el caso al encontrarse bajo secreto de sumario.