El fiscal Anticorrupción Jesús Carrasco denunció el entramado de ONG que presuntamente beneficiaba a empresas afines en el mes de mayo del año pasado, en plena campaña electoral para las elecciones municipales y autonómicas. Carrasco había comenzado las averiguaciones en el mes de octubre de 2010. En abril de 2011 solicitó un plazo de otros seis meses para seguir indagando y se negó a hacer ninguna aclaración para no influir en los comicios.

Algo debió pasar en el mes de mayo para que, en plena tormenta electoral, presentara una denuncia ante el Juzgado de Instrucción número 21 de Valencia, exponiéndose a que el tema hubiera transcendido con su evidente influencia en las elecciones. Cabe recordar que había una conselleria implicada en el escándalo.

Desde ese día y con la supervisión del fiscal Anticorrupción, la juez Nieves Molina inició una investigación que ha acabado con las detenciones de ayer. En concreto, ocho meses de indagaciones han valido para montar una operación coordinada con la Unidad Central de Delitos Económicos y Financieros de la policía nacional en Madrid.

Según ha podido saber este periódico, el fiscal y la policía han interrogado durante estos meses a personas de la conselleria que dirigía Rafael Blasco. Por su parte, un equipo de expertos en cooperación internacional venidos desde Madrid ha ayudado en las pesquisas. Los detenidos ampliarán ahora la información que no se sabe hasta donde llegará.