Mosquiteras, muebles de cocina, electrodomésticos, ferreteros, cerrajeros o pintores; todo se anuncia en la calle en pequeños carteles más o menos elaborados que, siempre que se eludan las sanciones municipales, nada baratas, por cierto, permiten promocionar el negocio en plena calle y sin coste alguno. En los últimos meses proliferan como setas.