60.000 manifestantes según los sindicatos y 50.000, según la policía, han acudido a la protesta contra los recortes en los servicios públicos. Representantes sindicales y de los sectores públicos han encabezado la marcha reivindicativa con una pancarta en la que se podía leer "No a los recortes en los servicios públicos. Depuración de responsabilidades en el Consell", según explica Efe.

Convocados por UGT, CC.OO, CSIF, FSES e Intersindical, y con el apoyo de PSOE, EU y Compromís, entre otras formaciones políticas, a la protesta asisten representantes del sector sanitario, educativo, de bienestar social y funcionarios, entre otros.

Miles de personas se agolpaban poco después de las seis desde las escaleras del instituto alicantino Jorge Juan por toda la calle General Marvá hasta la plaza de los Luceros y ocupaban también la avenida de la Estación. Entre ellas se podía ver a trabajadores del sector sanitario, con sus batas de trabajo, así como a bomberos de uniforme. Las pancartas rezaban lemas como "Ni voz, ni educación, ni futuro".

Tras la pancarta principal, los asistentes han reivindicado con megáfonos y pitos la retirada del citado decreto, y han mostrado rótulos con numerosos lemas, como 'Lo público no se vende, lo público se defiende', 'Los recortes a Las Cortes' o 'Sin negociación, nunca imposición'.

Entre los asistentes, además de numerosos dirigentes y delegados de los cinco sindicatos convocantes, estaba la portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Alicante, Elena Martín, y su homólogo de EU, Miguel Ángel Pavón, así como representantes de otras formaciones políticas.

Después de alcanzar la sede provincial del Consell, el catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Alicante Manuel Alcaraz ha leído el manifiesto suscrito por los sindicatos, en el que se ha tildado de "agresión al personal del sector público y años servicios que se prestan" al conjunto de los recortes.

"Pretenden ahorrar más de 1.000 millones de euros de la forma más fácil, recortando salarios y servicios", ha afirmado Alcaraz.

El manifiesto, en el que se denuncia la intención del Consell de "allanar el camino para despedir hasta un 25% del personal interino de los diferentes sectores, subraya que las medidas aprobadas "no pretenden ni racionalizar ni ordenar las administraciones públicas".