La Policía puso ayer a disposición judicial al joven Pablo Sogorb, empleado de Caja del Mediterráneo e hijo del director de Auditoría y Control de esta entidad, Teófilo Sogorb, bajo la acusación de amenazar y coaccionar a los interventores designados por el Fondo de Reestructuración Bancaria (FROB) para dirigir la caja después de que ésta fuera intervenida, y también al director de INFORMACIÓN, Juan R. Gil, entre otras personas, contra las que, según la investigación, desplegó en internet campañas injuriosas e incluso en algún caso amenazó con atentar, dando a entender que hablaba en nombre de grupos terroristas como los GRAPO, todo ello para intentar conseguir que se tramitaran y publicaran supuestas denuncias, no probadas, contra la anterior directora general de la CAM, María Dolores Amorós. Además, también utilizó datos personales de algunos de los amenazados o de personas próximas a ellos en páginas pornográficas e incluso aludió al posible secuestro de un menor.

Sogorb, de 25 años de edad, fue detenido por agentes de la Brigada de Delitos Económicos del Cuerpo Nacional de Policía especializados en nuevas tecnologías el pasado lunes, en una biblioteca de la Universidad de Alicante, desde la que supuestamente mandaba los anónimos amenazantes, justo en el momento en que se disponía a enviar uno de ellos. Al ser detenido, reconoció según fuentes policiales los hechos, que justificó por la animadversión que dijo sentir contra la anterior directora general de la entidad, destituida por el FROB, María Dolores Amorós, aunque posteriormente los desmintió y ayer, asistido por un abogado, los negó en el juzgado.

Meses de pesquisas

La investigación se inició hace meses, a raíz de la denuncia presentada por el jefe de Seguridad de la CAM, tras recibir los interventores del FROB correos electrónicos anónimos en los que se les amenazaba con atentar contra ellos si no incluían en el expediente que instruyen contra María Dolores Amorós una serie de denuncias consideradas falsas. En esos anónimos, según ha podido saber este periódico, se pretendía dar la impresión de que, de no cumplir las exigencias, grupos terroristas, como el GRAPO, una banda nunca extinguida y en cuyo historial existen numerosas acciones contra miembros de entidades financieras o empresarios, podrían tomar represalias.

Por su parte, el director de INFORMACIÓN, Juan R. Gil, recibió también distintos correos electrónicos en los que se le instaba a publicar esas mismas informaciones, que el fiscal y el propio Banco de España consideraron sin fundamento, contra Amorós, o de lo contrario se iniciaría contra él una campaña de difamación a través de internet. El director de este periódico se negó a publicar lo que en el chantaje se le exigía y, por el contrario, denunció inmediatamente los hechos al fiscal, que abrió una investigación. La respuesta fue el inicio de esa campaña de difamación en distintos medios digitales, además de que sus datos personales, al igual que los de otra persona relacionada con él, fueron insertados en varias páginas webs pornográficas.

Amenaza de secuestro

Sogorb también está acusado de haber amenazado a la hermana de María Dolores Amorós, a la que habría tratado de intimidar haciendo alusión al posible secuestro de su hijo menor, así como de insertar datos personales de esta mujer en webs pornográficas, lo que hizo que recibiera llamadas groseras en su teléfono particular.

Tras su detención, Pablo Sogorb fue puesto ayer a disposición judicial en San Vicente, ya que fue ésta la localidad desde donde supuestamente remitió los correos e hizo las campañas difamatorias, acusado de coacciones, amenazas condicionales e injurias, delitos que pueden acarrear penas de hasta tres años de prisión. La Policía se ha incautado de discos duros de ordenador y correspondencia, que fueron trasladados para su análisis al juzgado, donde después de prestar declaración la juez decretó ayer su libertad con cargos. El juzgado número 9 de Alicante instruirá ahora del caso, ya que es el que acumula las denuncias presentadas por estos hechos.

El abogado de Pablo Sogorb no quiso ayer hacer declaraciones sobre el asunto, a pesar de que este periódico le ofreció la oportunidad de explicar su versión de los hechos.

Apresado cuando iba a enviar un nuevo correo

Los agentes especializados en nuevas tecnologías de la Brigada de Delincuencia Económica de la Policía de Alicante han hecho durante meses un seguimiento exhaustivo del rastro informático que el presunto autor de las amenazas fue dejando, hasta llegar a la detención el lunes de Pablo Sogorb, un joven con unas notas excelentes en su currículum y que tiene un puesto de trabajo en la CAM, donde su padre ocupa un alto cargo, ya que ha formado parte de los equipos de Roberto López y de Amorós, y también de la actual cúpula de la entidad tras llegar los interventores del FROB. La Policía pudo determinar gracias a la investigación que los correos se enviaban desde un ordenador de la biblioteca de la Facultad de Económicas de la Universidad de Alicante y también obtuvo imágenes del joven en dicha biblioteca a las horas y en los días en que se enviaban los correos amenazantes o se lanzaban en internet campañas difamatorias. En dichas imágenes se observa que Pablo Sogorb, a pesar de utilizar un ordenador público en el que no tenía que identificarse, oculta parte de su rostro, en un recinto en el que existen varias cámaras.

La Policía esperó a que la biblioteca reabriera después de las vacaciones navideñas por si el hoy acusado volvía a ella. En el momento en que se encontraba preparando el envío de un nuevo correo de corte similar a los anteriores, los agentes procedieron a su detención en el centro universitario.