Se ha visto relegada de la cantina por su propia exjefa, que ha logrado dos de las cafeterías de institutos en la provincia. Lucía está desconsolada porque dice que "sus niños" no van a recibir la calidad y trato que daba ella.

¿Una cantina de instituto es negocio? ¿da para vivir?

Se trabajan 171 de los 365 días que tiene un año, ni más ni menos que los que está abierto el instituto y los precios tienen que estar muy ajustados. El negocio es pequeño y da para un sueldecito pero ahora nos quedamos todos en la calle.

¿Qué sueldecito?

En mi caso, en un instituto de 650 alumnos, son 900 euros al mes, o mejor dicho, eran. Pago 500 de hipoteca y ya no voy a poner ni mal comer. No hay derecho. Deberían tener en cuenta cómo nos portamos con los niños y yo hacía repostería a diario y puedo enseñar a hacer quische a quien sea. En cooperación con el centro organizaba menús para la Olimpiada Matemática y demás.

¿Qué hará a partir de ahora?

Cumplo 58 años en abril, ¿adón de voy a ir con mis años y con el paro que hay en todos sitios? Después de ocho años en la cantina me han partido en dos y ya no se dónde puedo trabajar.

¿Qué le han dicho en su centro?

Los alumnos me han visto llorar por el revuelo que se ha formado de niños y profesores firmando para que se revise la contrata. Nunca me limité a servir cafés y bocadillos, cuidaba de ellos.