El as en la manga que el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, se guardó para su declaración el pasado martes ante el tribunal que lo juzga tiene, como, subrayó el propio Camps, constancia por escrito. Documentación de Presidencia de la Generalitat que maneja la defensa del exjefe del Consell revela cómo algunos obsequios que llegaron al Palau con motivo de la fiestas de Navidad en 2004 fueron devueltos a su destinatario. Este diario ha tenido acceso a unos escritos que evidencian la devolución de un regalo valorado en 1.800 euros que una importante constructora hizo llegar al Presidencia de la Generalitat en las Navidades de 2003.
Según se desprende de la citada documentación, con fecha de registro marzo de 2004, desde el Gabinete del presidente se remitió una carta a la citada empresa en la que en nombre de Francisco Camps se transmitía "el agradecimiento" por su "comprensión y predisposición para destinar el valor del obsequio que tuvo la amabilidad de remitirle con motivo de las fiestas navideñas, a otro uso más acorde con la singularidad de estas fechas". La secretaria del exjefe del Consell añadía el interés de la Generalitat por conocer el destino de la donación. "Le agradecería que en el momento que sea posible, me haga saber la finalidad de esa contribución. En espera de sus noticias y reiterándole una vez más su agradecimiento, reciba un atento saludo", finalizaba el escrito.
Un mes después, el 27 de abril de 2004, llegó la respuesta de la constructora a la Plaza de Manises. Con fecha del 21 de abril la secretaria del empresario comunica al Gabinete del presidente que el valor del obsequio -precisa que es de 1.800 euros- ha sido donado a la Escuela El Cau, un centro de niños autistas de Castelló. "Tal como nos indicaron, les remito justifican te del donativo que hemos hecho por 1.800 euros, valor del obsequio. Como verán es a la escuela Cau, que es un centro de niños autistas, de aquí de Castelló", añade.
Otros papeles en poder de la defensa que no han sido incorporados en la causa dan fe también de cómo existía un protocolo en Presidencia para registrar los obsequios que llegaban al Palau. Aparece incluso el recibo de la citada asociación benéfica en la que su presidente, Juan Rodríguez Abellán, da cuenta de que se la ha donado la citada cantidad. En años posteriores, la empresa siguió realizando la donación a la asociación e informando al Palau de la Generalitat.
Fuentes de la defensa del expresidente indicaron que este no fue el único caso. Durante el interrogatorio de una de las fiscalas Anticorrupción, Camps mantuvo que en sus primeras Navidades al frente del Consell dio órdenes para que los regalos que superaban cierto valor fueran devueltos o destinados a un fin benéfico. La avalancha de regalos que, según otras fuentes, al presidente con motivo de las fiestas navideñas fue disminuyendo conforme se corrió la voz de que no eran aceptados. Según ha podido saber este diario de fuentes del sector empresarial el gesto no sentó bien a algunos empresarios acostumbrados a agasajar a responsables públicos en Navidad.
La defensa del expresidente no ha querido incorporar la documentación a la causa. Tampoco Camps había hasta ahora hablado de estas cuestiones. No lo hizo ni si quiera cuando le interrogó el instructor de la causa José Flors, un silencio que desconcertó el martes a la propia fiscal. Cabe apuntar que a Camps se le juzga por haber aceptado diversas prendas de vestir de las empresas de la trama Gürtel. La defensa, que ejerce el penalista Javier Boix, pretende demostrar ante el jurado que el expresidente siempre se ha comportado como un político ejemplar y austero.
La defensa no aporta la documentación a la causa
Los documentos de Presidencia de la Generalitat que constatan la devolución de obsequios de valor al presidente de la Generalitat Francisco Camps no fueron aportados a la causa ni durante la fase de instrucción ni posteriormente. Camps, desde que estalló el escándalo, se ha quejado de que no ha tenido ocasión de defenderse. Según su declaración, no habló de este asunto durante el interrogatorio con Flors en la fase de instrucción. Camps alegó que el motivo fue que no le preguntaron ex profeso sobre regalos de Navidad que llegaron al Consell. Con todo, tuvo la oportunidad de hacerlo. j. r.valencia
