Los farmacéuticos mueven ficha para reclamar a la Generalitat Valenciana los 60 millones que, según el calendario de pagos pactado el mes pasado, les tendría que haber abonado antes del día 10 de diciembre y cuyo ingreso no se ha realizado. Para comenzar, los boticarios de las tres provincias han convocado para mañana a las 13 horas una manifestación en Valencia, frente a la Conselleria de Hacienda, según confirmó ayer el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Alicante, Jaime Carbonell. También mañana, a partir de las 9.30, los boticarios de Alicante celebrarán una asamblea "para decidir si se realizan paros patronales la próxima semana". Una medida de presión que debatirán hoy en sus respectivas asambleas los colegios de Castellón y Valencia.

Los representantes de estas tres instituciones provinciales se reunieron ayer en Valencia con los consellers de Hacienda, José Manuel Vela, y Sanidad, Luis Rosado. "Nos han trasladado su voluntad de pagar, pero nos han dicho que hay un problema de tesorería y que hasta finales de mes no podrán hacer frente a la deuda, el problema es que nosotros no aguantamos más", explicó ayer Carbonell. La deuda global de la Generalitat Valenciana con los farmacéuticos de la Comunidad asciende a 420 millones de euros, 160 de ellos pendientes en la provincia de Alicante. A principios del mes de noviembre se abonaron 60 millones "correspondientes a la mitad de la factura por las recetas dispensadas en julio". Según el calendario de pagos establecido por el Consell con los farmacéuticos "en los primeros 10 días de diciembre se tenían que haber pagado los 60 millones del resto de julio. A finales de diciembre y hasta el 10 de enero se harían otros dos abonos de 60 millones cada uno, con lo que aún quedarían pendientes dos meses".

Pese a la promesa que ayer realizaron los dos consellers "de pagarnos los dos plazos de diciembre (120 millones) el día 23, nosotros ya no nos fiamos de las buenas intenciones", señaló Carbonell, quien agregó que "nos imaginamos que el pago de la deuda que mantienen con nosotros y con otros proveedores dependerá de la emisión de los bonos patrióticos de la Generalitat". Ante la más que previsible convocatoria de paros patronales, el presidente de los farmacéuticos alicantinos señaló que "trataremos de que el paciente sea el último perjudicado de esta situación, cumpliendo con los servicios mínimos que nos marquen desde la Generalitat". Para Carbonell, la huelga es la peor opción posible, "pero algo tenemos que hacer porque 300 millones de la deuda los estamos financiando los farmacéuticos con créditos personales y la situación es insostenible".

Carbonell recordó que ya hay farmacias en concurso de acreedores y que, aunque de momento no ha ocurrido, "podrían darse casos de desabastecimiento de medicamentos si no podemos pagar a los almacenes y éstos ya se cansan de fiarnos".

El Colegio de Farmacéuticos de Alicante fletará mañana autobuses para que vaya a Valencia el mayor número de boticarios de la provincia, que cuenta con 785 oficinas de farmacias. La asamblea tendrá lugar en la sede del colegio a las 9.30 horas y a las 10.45 partirán alrededor de una docena de autobuses para participar en la protesta.