El famoso anuncio "si bebes, no conduzcas" de Steve Wonder, que protagonizó en 1985 una campaña contra el consumo de alcohol al volante, vuelve este año por Navidad junto con 428 pruebas de alcoholemia diarias en la provincia. La DGT recupera un lema que sigue plenamente vigente 26 años después para los medios de comunicación y lo acompaña desde ayer con 428 pruebas de alcoholemia diarias hasta el domingo.

Habrá 14 dispositivos de la Guardia Civil de Tráfico desplegados cada día por toda la provincia, mañana y tarde, para controlar a los conductores y se estima que en total se efectuarán 3.000 pruebas de alcoholemia. Esta campaña cumple varias funciones, ya que además de concienciar a los conductores que se someten a las pruebas, los infractores sufren duras penas y además la publicidad que se da a estas iniciativas sirve de efecto disuasorio, según destacó ayer el subdelegado del Gobierno, José Pérez Grau.

Para el inicio de la campaña la Subdelegación convocó ayer a los medios de comunicación a un control desplegado en el peaje de Sant Joan-El Campello de la AP-7. Allí acudieron Pérez, representantes de la DGT y Hugo Ghisolfo, miembro de la Asociación de Lesionados Medulares y Grandes Discapacitados Físicos (Aspaym), que habló con varios conductores para concienciarlos de los peligros de ir al volante bajo los efectos del alcohol.

Ghisolfo, que se quedó parapléjico hace 24 años en un accidente de tráfico, explicó a uno de los conductores que "el tema del alcohol está muy arraigado. Se dice que por una copa no pasa nada y no es así. El alcohol es incompatible al volante. Para divertirse no es necesario beber ni drogarse".

El subdelegado anunció que al finalizar este año esperan que el número de controles realizados en la provincia supere en un 20% los efectuados en 2010, y recordó que las posibilidades de sufrir un accidente de cualquier tipo "se multiplican por nueve si hemos ingerido alcohol". Del mismo modo Pérez destacó que desde el mes pasado se está llevando a cabo una prueba piloto en la provincia para detectar el consumo de estupefacientes al volante, que ha dado un preocupante dato: de 32 conductores 18 dieron positivo, es decir más del 56%. Por ello anunció que la intención es extender estos controles, que ayudarán de forma decisiva a rebajar esa cifra.

Grau incidió en que "Alicante lidera la bajada en víctimas mortales en las carreteras, ya que de los 140 fallecidos en 2003 hemos pasado a 48 en 2010", y que por el momento en 2011 también se están mejorando las cifras del pasado año, ya que hasta ayer se habían registrado 40 muertos, cinco menos que en el mismo periodo de 2010.

Casi 850 arrestados

de enero a noviembre por conducir ebrios

En los primeros once meses del año han sido detenidas en la provincia 843 personas por conducir con una tasa de alcohol muy superior a la permitida. El límite en aire espirado está en el 0.25 mg/l, pero si se supera el 0,60 mg/l el Codigo Penal contempla penas de prisión de tres a seis meses o multas de seis a doce meses o trabajos para la comunidad.

En 2010 fueron detenidas por conducir bajo los efectos del alcohol 931 personas, por lo que la cifra a final de 2011 se prevé que sea similar o superior al pasado año. Del mismo modo en cuanto a las pruebas de alcoholemia que se han practicado en los primeros once meses de 2011, han sido 125.562, de las cuales 4.143 dieron positivo, mientras que en todo 2010 se realizaron 13.000 pruebas menos con un total de 4.254 positivos. En este caso el presente ejercicio registra más controles y se prevén más positivos respecto a 2010.