Sin liquidez y asfixiado por las facturas pendientes. Con esta situación, el Ayuntamiento de Alicante se ha visto abocado a solicitar un crédito de 14 millones de euros al Instituto de Crédito Oficial (ICO) que, según la Concejalía de Hacienda, permitirá cancelar deudas pendientes con las empresas que han prestado servicios al Consistorio con anterioridad a diciembre de 2010.
Como afirmó el edil del área, Juan Seva, el crédito permitirá "sanear" las cuentas municipales y saldar buena parte de las deudas con pequeñas y medianas empresas, a las que se dará prioridad a la hora de abonar facturas pendientes. "Lo hacemos por falta de liquidez y porque no tenemos más remedio", admitió el concejal, quien señaló que se trata de la cantidad máxima de crédito que puede solicitar el Ayuntamiento.
En su opinión, "es un préstamo muy duro", puesto que las arcas municipales tendrán que devolver euro a euro, con un interés del 6,5%, en tres años. Como aseguró, los 14 millones de euros solicitados al ICO "no solucionan el problema" al que se enfrentan las debilitadas arcas municipales, pero "nos permitirá cumplir con el compromiso de pago a las empresas y proveedores para no acarrearles mayores dificultades económicas y evitar que algunas se vean abocadas al cierre".
El concejal afirmó que con el importe del crédito se podrán satisfacer las facturas pendientes que el Ayuntamiento tiene con 278 autónomos y pequeñas empresas y 156 con medianas y grandes. No obstante, en el orden de pago se dará prioridad a las facturas más antiguas y a las de las empresas más pequeñas, por lo que no queda asegurado que el crédito pueda alcanzar para cancelar las deudas pendientes con las grandes mercantiles, como puede ser la adjudicataria de la limpieza (Inusa), a la que las arcas municipales adeudan más de veinte millones de euros.
El concejal aseguró que, tras las medidas aplicadas por el Gobierno para reducir el déficit, el Ayuntamiento de Alicante no está en condiciones de pedir un préstamo para inversiones, pero sí pueden solicitar un crédito de la línea ICO-Entidades Locales. Se trata de una posibilidad que el Gobierno puso en marcha recientemente para impulsar la sostenibilidad de las cuentas municipales y dar la oportunidad a los ayuntamientos de cancelar las deudas con los autónomos y las pequeñas y medianas empresas. El importe del crédito no puede exceder el 25% de la participación anual de cada ayuntamiento en los impuestos estatales, que es lo que constituye la garantía. Sin no se liquida en el plazo establecido, el Ministerio de Hacienda puede efectuar las retenciones que procedan.
Este no es el primer crédito que solicita el Ayuntamiento de Alicante este año para hacer frente a las facturas pendientes con sus proveedores. En mayo, la Junta de Gobierno Local aprobó pedir a una entidad bancaria un crédito por valor de 17 millones de euros que las arcas públicas ya tendrían que haber devuelto. Con ese dinero, el Ayuntamiento tenía previsto pagar facturas pendientes a los proveedores municipales, pero el hecho de que la Concejalía de Hacienda se haya visto obligada a solicitar un nuevo crédito demuestra que muchas de las deudas contraídas por las arcas públicas con las empresas que abastecen o prestan servicios al Ayuntamiento siguen sin liquidarse.
Los impagos incrementan las dificultades que atraviesan muchas empresas alicantinas en tiempos de crisis, sobre todo para las más pequeñas. Es por eso que con el nuevo crédito, cuya petición se aprobará en el próximo pleno municipal, se dará prioridad al abono de las facturas que se adeudan a los autónomos y a los pequeños proveedores.
